El BCE cumple las previsiones y mantiene los tipos de interés en el 4,5%

El riesgo a un incremento de la inflación y las moderadas perspectivas de crecimiento en la eurozona impulsan al eurobanco a congelar el precio del dinero por tercera vez

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Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo. REUTERS/Kai Pfaffenbach.
Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo. REUTERS/Kai Pfaffenbach.

El Consejo de Gobierno del BCE ha cumplido con lo esperado y ha decidido mantener los tipos de interés por tercera vez consecutiva. Así, la tasa de referencia para sus operaciones de refinanciación sigue en el 4,50%, mientras que la tasa de depósito continuará en el 4% y la de facilidad de préstamo en el 4,75%.

La nueva congelación de los tipos de interés viene motivada por la posibilidad de un repunte de la inflación que la aleje del objetivo del 2% que se ha marcado el eurobanco y por las moderadas perspectivas de crecimiento en la eurozona.

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Y es que, “la batalla contra la inflación aún no está ganada debido a que la subyacente se situó en un 3,4% en diciembre en tasa interanual y existe la posibilidad de que las subidas salariales ejerzan una mayor presión inflacionista este año”, asegura Franck Dixmier, director de inversiones global de Renta Fija de Allianz Global Investors.

Otro factor que puede incrementar los precios es la subida de la energía que “el año pasado fue netamente deflacionaria y ahora mismo no lo es”, apunta Alberto Valle, director en la consultora financiera Accuracy. Prevé que el efecto base y las presiones en la cadena logística por la situación geopolítica, pueden hacer que la inflación se mantenga en valores por encima de 3% durante el primer semestre del año.

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Respecto a la subida de precios, el eurobanco ha señalado que, pese al repunte temporal de la inflación por los precios de la energía, y situarse en diciembre en el 2,9%, la subyacente, que no tiene en cuenta la energía y los alimentos frescos, ha continuado su tendencia a la baja. Reconoce que las anteriores subidas de tipo continúan transmitiéndose con fuerza a las condiciones de financiación, lo que está frenando la demanda y contribuyendo a reducir la inflación.

Todo depende de los datos

En cuanto a los futuros movimientos respecto a los tipos de interés la autoridad monetaria ha asegurado que seguirá “aplicando un enfoque dependiente de los datos” y que se basarán en sus futuras perspectivas financieras, la dinámica de la inflación subyacente y la transmisión de su política monetaria a la economía en la eurozona.

Una economía que para por un momento de debilidad. El supervisor ya ha advertido de la posibilidad de que se produzca una recesión técnica en el segundo semestre de 2023, después de que el producto interior bruto (PIB) retrocediera un 0,1 % en el tercer trimestre.

Máximos de más de 20 años

Los tipos de interés de la eurozona se encuentran en su nivel más alto desde 2001 después de que el BCE los subiera de forma ininterrumpida en diez ocasiones desde julio de 2022 hasta septiembre de 2023, con aumentos que han oscilado entre los 25 y los 75 puntos básicos.

Un ciclo de subida del precio del dinero al que puso freno el pasado 26 de octubre, cuando los mantuvo en el 4,5%, un nivel que ha prolongado por tercera vez consecutiva este jueves.

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