La Dirección General de Tráfico (DGT) se encarga de regular estrictamente las condiciones para la tenencia y uso del carnet de conducir en España. Ante el desconocimiento general que existe acerca de esta normativa, se han identificado diversas circunstancias que pueden llevar a la suspensión o retiro del permiso de conducir.
Primero, los puntos del carnet de conducir son un elemento clave en el seguimiento de la conducta al volante. Si un conductor pierde todos los puntos, producto de cometer infracciones reiteradas, se enfrenta a la retirada del carnet. La DGT estipula que se debe entregar el carnet en la Jefatura Provincial de Tráfico, incumplir con esta norma y conducir sin permiso puede incurrir en multas de hasta 6.000 euros o incluso penas de cárcel de entre tres a seis meses en situaciones de reincidencia.
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En casos de denuncia por pérdida o robo del carnet y posterior recuperación del mismo, es obligatorio que el titular devuelva el duplicado a la DGT en un plazo no mayor a 15 días. La omisión de esta acción se considera fraude en documentos públicos, con penas que oscilan desde los tres a los seis años de prisión.
La caducidad del carnet también es causa de entrega. Los permisos de conducción tienen una vigencia limitada y deben renovarse cada diez años. Una vez vencido, el carnet debe ser entregado a la Jefatura Provincial de Tráfico al momento de la renovación. Conducir con el carnet caducado es una infracción grave, sancionada con multas de 200 euros.
Otras infracciones
El cambio de residencia a otra provincia también obliga a actualizar el domicilio en la DGT dentro de los 15 días siguientes al traslado. Es preciso solicitar la expedición de una nueva licencia con la dirección actualizada y retornar la previa. De no hacerlo, el incumplimiento es sancionable con una multa de 100 euros.
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Además, los reconocimientos médicos y psicotécnicos son requeridos periódicamente para evaluar el estado físico y mental de los conductores. Un resultado desfavorable en estas pruebas puede derivar en la retirada cautelar del permiso por un mínimo de seis meses. Solo tras superar un nuevo examen médico se puede recuperar el carnet de conducir.
Delitos contra la seguridad vial de gravedad, como conducción temeraria, la negativa a los test de alcoholemia o excesos de velocidad, pueden acarrear retiradas temporales o definitivas del permiso. Estas situaciones también requieren la entrega inmediata de la licencia.
Es relevante subrayar que tanto jueces como tribunales tienen la facultad de decretar la inhabilitación especial para la conducción de vehículos a motor, por periodos de seis meses hasta diez años, dependiendo de la gravedad del hecho.
La DGT también indica que los titulares de un permiso de conducir extranjero que residan en España más de seis meses por estudios o trabajo, deben canjearlo por uno español. Esto implica rendir las pruebas requeridas y entregar el carnet extranjero, no pudiendo hacer uso de este último una vez obtenido el español.
Por último, aquellos conductores que adolecen de una enfermedad o incapacidad severa deben informar a la DGT y proceder con la entrega voluntaria del carnet de conducir. Si en el futuro se demuestra la recuperación completa de la capacidad física y mental, podrán solicitar nuevamente su licencia.
No cabe duda de que conocer y cumplir con estas normativas es de vital importancia para los conductores. La falta de conocimiento puede resultar en serias consecuencias legales que van más allá de las sanciones económicas, pudiendo afectar a la misma libertad de la persona. Por ende, es crucial para cualquier conductor estar al tanto y actuar conforme a las regulaciones de la DGT.