Andalucía se prepara para posibles restricciones de agua en verano: “Estamos ante una situación extrema”

Andalucía se prepara para afrontar un verano de restricciones de agua, según ha anunciado el presidente de la Junta, Juanma Moreno. “Si en marzo, abril no tenemos las ansiadas lluvias, muy previsiblemente vamos a comenzar el verano con restricciones en las grandes ciudades”, ha declarado en una rueda de prensa este jueves.

La Junta de Andalucía aprobará el próximo 29 de enero el cuarto Decreto de Sequía, con una dotación de casi 200 millones de euros. El presidente ha insistido en hacer un llamamiento a los ciudadanos, sector privado e instituciones sobre un uso responsable del agua: “Estamos en una situación extrema y no se trata de alarmar, sino de ser realistas”. Moreno ha anunciado que se necesitan como mínimo “30 días de lluvia continuada” para “recuperar y poder afrontar este verano”. De no darse las precipitaciones, habrá que instaurar restricciones de agua en capitales como Málaga, Sevilla o Córdoba.

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En el mes de diciembre, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) advirtió que la sequía que sufre Andalucía es la mas larga del conjunto desde 1961. La comunidad ha registrado el tercer otoño más cálido y uno de los más secos de su historia. Las previsiones para enero no han mejorado, ha alertado Moreno. Actualmente, los embalses en Andalucía se encuentran al 20,45 % de su capacidad, cuando deberían estar al 50,83 %. En nivel rojo se encuentra la provincia de Almería, con un 9,38 % de embalsado. Todo parece indicar que Málaga, donde el agua embalsada no alcanza los 100 hectómetros cúbicos, pasará a une estado de sequía grave en los próximos días. Especialmente perjudicado se encuentra el embalse de La Viñuela, lleno al 7,27 % de su capacidad.

Moreno ha asegurado que la Junta de Andalucía va a dar prioridad a las obras en materia hidráulica, que se han convertido en “las más importantes que se están haciendo” dentro de la comunidad. Entre las medidas previstas para el decreto del próximo 29 de enero, las desalinizadoras han cogido gran peso. El presidente ha fijado el objetivo de que la desalinizadora de Málaga pase a 20 hectómetros cúbicos de capacidad, cuando actualmente está en seis. Se buscará alcanzar primero los 12 hectómetros cúbicos para los que fue diseñada y posteriormente ir ampliándola de manera portátil hasta los 20.

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De igual forma, buscarán alcanzar los recursos del subsuelo malagueño, altamente salinizados, a través de dos sondeos de la urbanización Guadalmansa, en Estepona, que aportarán 4 hectómetros cúbicos. Se planea conseguir otros ocho con un sondeo de Fuengirola y otro en la localidad de Trapiche, en la comarca de La Axarquía. Ha indicado que se requieren también obras en presas que se han quedado obsoletas para mejorar el embalsamiento de agua.

Asimismo, Moreno tiene claro que hay que “abrir la mano también a los trasvases y transferencias de agua de cuencas entre provincias, comunidades, e incluso países”, con Portugal como posible candidato. No obstante, la región del Algarve se encuentra en una situación similar por falta de lluvias, con restricciones al consumo de agua del 15 %. El presidente autonómico es consciente de que son actuaciones “complicadas porque hay que buscar siempre el consenso con el Gobierno central”.

Desde diciembre, la provincia se prepara para recibir agua mediante barcos, que llegarán en el mes de junio al Puerto de Málaga si no mejora la sequía, tal y como anunció el Gobierno regional el pasado 10 de enero. Los puertos de Algeciras y Carboneras también se estarían preparando para recibir estos barcos. El agua que llegue a las costas andaluzas se trasladará a plantas potabilizadoras y se incluirá en la red de suministro.