Quién es Mónica, soltera en ‘La Isla de las Tentaciones 7′: opositora y amante de los bailes latinos

“Me encanta el fuego y terminar siempre quemándome. Ellos ya notan el calor, ¿verdad chicos?”. Con esta frase se presentó Mónica Bonilla en el primer episodio de La Isla de las Tentaciones 7. Esta joven de 27 años es natural de Almería y está estudiando las oposiciones de educación especial.

Decidió participar en el reality de Mediaset porque cree que es una “verdadera tentación”, aunque asegura que lo que realmente está buscando ahora es “amor”. Habrá que seguir el desarrollo del programa para ver si puede encontrarlo o no durante su emisión.

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En su vídeo de presentación para el programa Mónica hizo hincapié en su pasión por los deportes. Practica atletismo, natación y también entrena. “Una de mis aficiones, que me gusta muchísimo, es bailar bachata. He tenido varios novios latinos también. No sé si es por eso que me transmitieron ese gusto por la música latina”, explicó.

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La joven española tiene el perfil de Instagram verificado como personaje público. En la actualidad cuenta con 34.700 seguidores y un recopilatorio de stories dedicado en exclusiva a La Isla de las Tentaciones. En su feed se pueden observar publicaciones de todo tipo: desde posados en la playa, pasando por looks en la naturaleza hasta imágenes en eventos de marcas.

Uno de los posts llama especialmente la atención, ya que Mónica lo define de la siguiente manera: “Recap de posiblemente el mejor día de mi vida”. La influencer acompañó este titular con una foto de su asistencia a los premios Latin Grammy 2023 que se celebraron en Sevilla.

Samaná (República Dominicana) es el escenario de lujo de la séptima temporada. El popular reality show de Telecinco, conducido por Sandra Barneda ha comenzado su última edición convirtiéndose una vez más en líder de audiencia en su horario de transmisión en España. Aunque no ha roto récords de temporadas previas, su formato centrado en relaciones y pruebas de fidelidad continúa captando el interés del público.

Situado en la pintoresca península de Samaná, en la República Dominicana, el programa se desarrolla en un entorno que promete realzar las emociones de los concursantes. Destacando por sus playas inmaculadas como Cosón, Frontón, Rincón y Cayo Levantado, junto con puntos de interés como el Parque Nacional de los Haitises, esta ubicación ofrece un telón de fondo de singular belleza natural y oportunidades para la aventura en sus manglares y cavernas.

El alojamiento de los concursantes está compuesto por dos villas de alto lujo. Villa Playa cuenta con 1.000 metros cuadrados de vivienda y otros 3.000 de terreno, y dispone de ocho habitaciones y ocho baños, además de piscina y jacuzzi. Villa Montaña, por su parte, ofrece 640 metros cuadrados habitables. Ambas instalaciones, caracterizadas por su exclusividad, están disponibles para alquiler con precios alrededor de los 1.600 euros por noche.

El encanto de Samaná como escenario no solo proporciona atractivo visual al reality de Telecinco, sino que también ha generado interés turístico hacia la región. La exposición de sus villas de lujo, en el marco de La Isla de las Tentaciones, resalta la exclusividad y el atractivo natural del destino caribeño, añadiendo valor a su ya rica oferta turística.