El Consejo de Ministros ha aprobado este martes equiparar legalmente el tabaco calentado, el que no llega a arder, con el tradicional. La nueva normativa incluye, además, la prohibición de que este contenga aromas, y obliga a que en el etiquetado figuren las advertencias de que es perjudicial para la salud.
El Real Decreto amplía la prohibición de comercializar productos del tabaco que contengan aromatizantes en sus componentes (como filtros, papeles para fumar, envases o cápsulas) o cualquier otra técnica que permita modificar el olor sabor de los productos del tabaco, o intensificar el humo a los productos del tabaco calentado.
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Tras el anuncio, muchos creyeron que se trataba de una medida contra los vapeadores y cigarrillos electrónicos, pero estos dispositivos no son lo mismo que el tabaco calentado.
Aprobamos en Consejo de Ministros:
— Mónica García (@Monica_Garcia_G) January 16, 2024
- El tabaco calentado tendrá la misma regulación que el tabaco convencional.
- Se prohíben los aromatizantes en productos del tabaco (filtros, papeles, cápsulas, etc).
Además estamos trabajando en el Plan Integral de Prevención y Control del…
Qué es el tabaco calentado
El tabaco calentado es un producto de tabaco novedoso que no genera combustión, sino que calienta el tabaco hasta los 400º C. Al calentarse el tabaco, producen aerosoles que contienen nicotina. Puede encontrarse bajo los nombres comerciales de IQOS(”I Quit Ordinary Smoking”), Glo, Ploom y Pax Al entre otros. Los productos de tabaco por calentamiento están formados por tres elementos. Primero, un producto de tabaco, ya sea picado o en polvo, que viene en forma de cigarrillo o en una cápsula. A este se incorpora un dispositivo electrónico de calentamiento, específico para cada producto, con una batería, un software de control de calentamiento y una fuente de calor. Por último, hace falta el dispositivo de carga de la batería.
Al igual que los vapeadores o cigarrillos electrónicos, funcionan con una batería que no quema el tabaco pero consigue emitir vapor. Sin embargo, a diferencia de los otros dispositivos, este sí contiene nicotina y por lo tanto es altamente adictivo. Incluye también otras sustancias químicas como aditivos y aromas añadidos, que son inhaladas por los consumidores.
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No existe evidencia para afirmar que los Productos de Tabaco por Calentamiento (PTC) sean menos nocivos para la salud que los productos de tabaco convencional, ni para aquellas personas que los consumen, ni para aquellas expuestas a sus emisiones. Por ello, el Gobierno ha decidido equipararlo a las formas de tabaco tradicional. Se trata de una medida en consonancia con la Unión Europea, ya que Bruselas empezó a aplicar la prohibición del tabaco aromatizado para cigarrillos electrónicos en noviembre de 2022
El secretario de Estado de Sanidad, Javier Padilla, explicó en una entrevista con Infobae España que son “una de las vías atractivas de introducción y de incorporación de nuevas de personas que no fumaban al ámbito del fumar”.
El Ministerio de Salud informa de que, como todas las formas del tabaco, el calentado es peligroso para la salud y genera adicción. Su uso supone la emisión de sustancias peligrosas y no es inocuo para las personas que inhalan el humo alrededor.