La pequeña ciudad de Portugal recomendada para jubilados que es Patrimonio de la Humanidad y está a una hora de España

En el Alentejo, la región más grande de Portugal, hay lugares paradisíacos como las playas de Zambujeira do Mar, el castillo del pueblo de Serpa y las “ciudades de mármol”. Sin embargo, hay otros destinos menos conocidos pegados a la frontera con nuestro país que también merecen una visita y que, además, están recomendados para jubilados extranjeros.

En este sentido, la revista especializada en jubilación International Living, publicó recientemente el ranking de los mejores lugares del mundo para jubilarse en 2024 (Global Retirement Index), y Portugal ocupa la segunda posición.

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Sol, playas, un coste de vida barato, la posibilidad de encontrar buenos precios en el alquiler o en la adquisición de viviendas y la estabilidad política del país son algunos de los factores que han jugado a su favor a la hora de elaborar la clasificación. Pero ¿cuáles son los mejores lugares para jubilarse en el país vecino?

Oporto y Lisboa, como no podía ser de otra manera, están entre ellos. No obstante, la vivienda aumenta el coste de la vida en estas dos ciudades si se compara con el de otras poblaciones más underground. Una de ellas, por ejemplo, es Tavira, una pequeña localidad a solo 30 minutos de Huelva que combina un casco histórico espectacular con múltiples opciones de playas y una variada oferta cultural. Y otra opción no tan al sur es la de Évora, una ciudad Patrimonio de la Humanidad que Turismo de Portugal define como “un libro de historia del arte portugués” y a la que la mencionada revista internacional dedica un artículo para los jubilados extranjeros.

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La importancia de esta pequeña urbe en la historia de Portugal se remonta en la época romana. Entre el siglo II a.C. y el IV, Évora fue una ciudad clave en la ruta comercial hasta Roma. Más tarde los musulmanes la conquistaron y en el siglo XV los reyes de Portugal establecieron allí su residencia. Y lo mejor del paso de todas estas civilizaciones por el municipio es que su prestigio y buena parte de sus monumentos siguen presentes.

Por ejemplo, es indispensable la visita al temblor romano, los antiguos baños termales de la misma época que fueron descubiertos en 1987 debajo del edificio del ayuntamiento, la capilla de los huesos (adornada con 5.000 huesos de monjes), la catedral o el palacio de los Duques de Cadaval.

En todo su casco histórico hay un gran ambiente, pero sin duda alguna el epicentro es la Praça do Giraldo, donde convergen ocho calles. Cafeterías, terrazas, tiendas… Todo está a mano en esta zona de Évora.

Además, el coste de la vida es asequible y es compatible con el cobro de la cuantía de la pensión media en España: 1.198,7 euros al mes. Tal y como señala International Living, una pareja de jubilados puede vivir cómodamente en Évora por un precio que en total ronda los 2.115 euros (1.057 euros cada uno), incluyéndose en esa cifra el precio del alquiler, los gastos de ocio, comida y facturas habituales.

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Por si estos atributos fueron escasos, el clima también atrae a los visitantes y nuevos residentes. En verano la temperatura media es de 29ºC, mientras que en invierno la mínima no baja de 5ºC, siendo enero el mes más frío y con máximas de 13ºC. Según los datos de Weather Spark, las precipitaciones son escasas y durante diciembre, mes en el que más llueve cada año, solo hay lluvia 8 días de media.

La zona centro de Évora tiene inmuebles antiguos y poca oferta de alquiler disponible. Por ello, los precios no están disparados, pero tampoco son asequibles. Por ejemplo, en el momento de publicación de este artículo se alquila en Idealista un piso reformado de 105 metros cuadrados y tres habitaciones cerca del teatro por 1.200 euros al mes. También hay una casa independiente de 98 metros cuadrados y dos habitaciones por 900 euros al mes en el número 36 de la calle Egas Moniz.

Pero si nos alejamos solo unas calles del centro se pueden encontrar alquileres más baratos. Un chalet de 120 metros cuadrados y tres habitaciones por 1.000 euros al mes en la zona de Senhora da Saúde es una buena muestra de ello. Asimismo, se alquila un chalet adosado con las mismas dimensiones y estancias en la avenida Pedro Álvares Cabral.

Las dos grandes poblaciones españolas que quedan más cerca son Badajoz (1 hora y 12 minutos en coche aproximadamente) y Villanueva del Fresno (1 hora y 4 minutos). En el primer caso, el trayecto discurre íntegramente por la carretera A6, mientras que en el segundo la vía a utilizar es la N-256.