La bombona de butano sigue subiendo de precio: esto es lo que cuesta ahora

En mayo de 2022, la bombona de butano alcanzó su precio máximo de los últimos cuatro años: 19,55 euros. Fue entonces cuando el Gobierno de España decidió fijar un coste límite de venta, antes de impuestos, de los gases licuados del petróleo envasado. En un principio, esta medida terminaba al finalizar el año pero, en enero, se prorrogó hasta junio. Ese mes, el último decreto de la legislatura lo alargó hasta finales de 2023. Y lo cierto es que, desde el pasado septiembre, su precio ha ido subiendo.

Para calentar el hogar, cocinar… son muchos las razones que hacen de la bombona de butano un elemento imprescindible en las viviendas que aún la utilizan. De ahí que, a quienes tengan que comprarla, les interesará conocer que, a pesar de que su precio sigue limitado por ley, este ha sufrido un importante aumento desde el 16 de enero, en comparación a los últimos meses, y se mantendrá durante las próximas semanas. No obstante, lo cierto es que el coste del gas licuado ha logrado mantenerse, mientras el de la luz, el tabaco, la gasolina o la cesta de la compra hacía lo contrario.

Te puede interesar: Este es el dinero extra que te debe pagar Hacienda si te devuelve la declaración de la Renta fuera de plazo

Para calcular su precio, hay que tomar como base el coste que tiene en el mercado internacional la materia prima (propano y butano). Además, entran en juego otros factores, como los fletes (transporte) y la evolución del tipo de cambio euro - dólar. Al dato resultante se ha de sumar el IVA, del 21%, y el Impuesto Especial sobre los Hidrocarburos (IEH), de 1,5 euros por cada kilo. Tras la invasión de Ucrania, el Gobierno estableció un límite del 5% en la revisión, por lo que no puede subir ni bajar más del porcentaje fijado.

Desde este martes 16 de enero, sube el precio de la bombona de butano de 12,5 kg, hasta los 15,89 euros, incluyendo impuestos, tal y como indican desde el Ministerio de Transición Ecológica. Este aumento se produce después de que, en noviembre, también se registrara un incremento en el coste.

Te puede interesar: Mercadona, Carrefour y Dia temen que la crisis del Mar Rojo provoque desabastecimiento: adelantan las compras de productos para llenar almacenes

La organización Civio ha indicado que, a pesar de esta última alza, el precio actual dista bastante de la tarifa registrada en septiembre de 2020, que era de algo más de 12 euros. Es importante destacar que, durante 2023, la bombona tradicional ha experimentado seis descensos consecutivos desde noviembre de 2022, lo que supone una reducción acumulada de más de cinco euros.

Según el Boletín Oficial del Estado (BOE), el precio de la bombona de butano regulada se revisa y puede variar cada dos meses, mientras que las bombonas denominadas “ligeras” tienen un costo determinado por la libre competencia y la política de precios de la empresa distribuidora. No obstante, el Gobierno tiene la capacidad de limitar los incrementos de precio del gas butano hasta un tope del 5% cada bimestre, habiendo ejercido ya esta facultad como medida de contención.

El precio máximo de la bombona de butano se ha fijado en los 103,56 céntimos por kilo. Por ello, tras calcularse con el peso estándar de una bombona de 16,8 kilogramos y sumar el Impuesto de Hidrocarburos y el IVA, se obtiene un coste final de 15,89 euros, que es el que registra en la actualidad.

Te puede interesar: La jubilación anticipada más perjudicial para la pensión: el caso en el que cobras un 21% menos

El cálculo del precio final incluye, entre otros componentes, la cotización internacional de las materias primas, que ha descendido en 2,6 céntimos por kilo en comparación con la revisión previa realizada en noviembre, pero los aumentos ligeros en los fletes y el tipo de cambio han ajustado el coste. A esto se une el llamado término de desajuste unitario, que para el bimestre actual se cifra en +1,0976 céntimos por kilo, una cantidad que refleja la diferencia permitida por el Gobierno antes de aplicar los impuestos y que se pretende recuperar en las subsiguientes revisiones tarifarias.

La organización Civio ha explicado que el mecanismo de fijación del precio límite por parte del Gobierno no implica que las empresas del sector energético estén recibiendo menos por cada bombona vendida, sino que cualquier coste que supere el incremento establecido -un 5% en la actualidad- se acumula para ser abonado en el futuro cuando se presente una rebaja. Así, el desajuste unitario reflejado se ajustará siguiendo el comportamiento del mercado y las políticas gubernamentales.