Lejos quedan ya las subidas de la inflación a doble dígito. El Instituto Nacional de Estadística ha confirmado este viernes que el Índice de Precios al Consumo (IPC) se mantuvo sin cambios en diciembre respecto al mes anterior y recortó una décima su tasa interanual situándose en el 3,1% al cierre de 2023. Los alimentos, que han sido los grandes protagonistas de la inflación en el último ejercicio, han cerrado el año con una subida del 7,3%. Pese a que aún no se ha logrado el objetivo de inflación al 2%, lo cierto es que los precios han dado un respiro en 2023, aumentando menos de la mitad de lo que lo hicieron en 2022, año marcado por el estallido de la guerra en Ucrania.
Según Estadística, la evolución del precio de los alimentos se debe al abaratamiento de las legumbres y hortalizas y a que los precios de la leche, huevos, queso, pan, cereales y carne subieron en diciembre de 2023 menos de lo que lo hicieron en igual mes de 2022. Hay que tener en cuenta que muchos de estos productos están incluidos dentro de las medidas fiscales del Gobierno. Así, según los cálculos de distintas asociaciones de consumidores, la rebaja del IVA de estos alimentos ha impedido que los precios suban en más de un 10%, aunque, en los últimos meses cada vez se nota menos esta exención fiscal.
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Por contra, el transporte elevó su tasa interanual casi cuatro puntos, hasta el 3,9%, como consecuencia de que el precio de los carburantes para vehículos personales no bajó tanto en diciembre de 2023 como en igual mes de 2022. Con la moderación de su tasa interanual en diciembre hasta el 3,1%, la inflación encadena dos meses consecutivos de descensos y cae a su menor nivel desde el pasado mes de agosto, cuando se situó en el 2,6%.
La inflación subyacente -que no incluye alimentos no elaborados ni productos energéticos- bajó siete décimas en diciembre, hasta el 3,8%, tasa siete décimas superior a la del IPC general y la más baja desde marzo de 2022, cuando se situó en el 3,4%.
En términos mensuales -diciembre de 2023 sobre noviembre del mismo año-, el IPC no experimentó variación tras subir los precios de los paquetes turísticos y la electricidad y bajar los precios de los carburantes y del vestido y el calzado por la campaña de rebajas de invierno. En el último mes de 2023, el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) situó su tasa interanual en el 3,3%, la misma que en el mes anterior. Por su parte, la variación mensual del IPCA fue del 0,0%.
Los productos que más se encarecen en 2023
De las 199 subclases de productos del IPC, 162 han incrementado sus precios en tasa interanual, 32 los han bajado y cinco no han registrado variación. En tasa interanual (diciembre de 2023 sobre el mismo mes de 2022), lo que más ha subido de precio es el aceite de oliva (+54,6%); el transporte marítimo de pasajeros (+25,8%); los paquetes turísticos nacionales (+17,9%); los zumos de frutas y vegetales (+15,5%) y los productos de confitería (+14,9%).
El aceite de oliva se encareció un 0,5% en diciembre de 2023 respecto al mes anterior, un 44,4% de media en 2023 y un 165,5% desde enero de 2021. Por contra, lo que más se abarató en el último mes del año en relación a diciembre de 2022 fueron otros aceites (-29,1%); el gas natural (-20,3%); el butano y el propano (-18,5%); la electricidad (-17,3%), y el transporte combinado de pasajeros (-15,4%).
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Sin tener en cuenta la rebaja del impuesto especial sobre la electricidad y las variaciones sobre otros impuestos, el IPC interanual alcanzó en diciembre el 3,4%, tres décimas por encima de la tasa general del 3,1%. Así lo refleja el IPC a impuestos constantes que el INE también publica en el marco de esta estadística.
Si se atiende a las medias anuales de 2023, los mayores incrementos de precios corresponden al aceite de oliva (+44,4%), el azúcar (+34,7%), las salsas y condimentos (+20%), la mantequilla (+19,5%) y el arroz y las patatas (+19,3% en ambos casos). En el otro extremo, los mayores descensos de precios en media anual fueron para el transporte combinado de pasajeros (-39%), la electricidad (-36,8%), los otros aceites (-21,9%), transporte de pasajeros por bus (-21%) y el transporte de pasajeros en metro (-19,7%).