Ana Pastor desvela el cariñoso apodo con el que llama a Antonio García Ferreras en casa

La presentadora ha acudido al programa ‘Y ahora, Sonsoles’ para promocionar su nuevo formato, ‘Generación TOP’

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Ana Pastor, en 'Y ahora,
Ana Pastor, en 'Y ahora, Sonsoles'. (Atresmedia)

Ana Pastor ha visitado este miércoles el programa Y ahora, Sonsoles para promocionar Generación TOP, el formato con el que ha dado el salto al entretenimiento para enfrentar a tres generaciones de famosos. La presentadora se ha sincerado con Sonsoles Ónega y ha roto su habitual discreción sobre su vida privada para relatar cómo es su día a día con Antonio García Ferreras, su pareja desde hace más de 15 años.

Tras rescatar varios momentos de complicidad en directo entre Ferreras y Pastor, que comparten trabajo en laSexta, Sonsoles ha querido saber si en la intimidad el presentador de Al Rojo Vivo llama a la periodista por su apellido, igual que hace en los platós.

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Así, la periodista ha confesado que su chico, con el que nunca ha llegado a casarse, intercala “Pastor y Ana” en casa. Además, ha desvelado cómo le llama ella cuando no les captan las cámaras: “En casa le llamo Ferri, pero en el teléfono le tengo guardado como Ferreras”, ha dicho, despertando la curiosidad de Ónega por si alguna vez se le ha escapado en directo. “Igual alguna vez se me ha escapado, soy humana”, ha bromeado.

“Somos muy intensos”

Pastor ha compartido con su compañera otros aspectos hasta ahora desconocidos de su relación con Ferreras, como que es él quien se encarga de cocinar en casa: “Él sabe cocinar y le gusta. Yo no, no tengo ese don”.

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Pero el director del área Editorial de Informativos de laSexta no solo toma las riendas de la cocina, ya que la presentadora asegura que el mando de la televisión lo controlan él y su hijo pequeño, Simón. Y este es, precisamente, uno de los pocos aspectos en los que Ana cede como madre: “Soy una madre durísima, insoportablemente dura, soy un poco Merkel”, reconoce.

Y es que, según comenta, su empeño como madre es que sus hijos valoren todo lo afortunados que son. “No me importa incluso que se sientan un poco culpables de la suerte que tienen si eso les ayuda a portarse mejor con el resto”, explica.

En cuanto a la convivencia con Ferreras, la comunicadora asegura que ambos son “muy intensos” y no dejan al margen su profesión en ningún momento: “Nuestra casa es como una redacción, para desgracia de nuestros hijos”. Además, recuerda la época en la que ella estaba trabajando en TVE y ambos competían por quitarse invitados: “Muchas veces ganaba yo”, bromea.

Finalmente, Sonsoles Ónega ha revelado una entrañable costumbre que tiene García Ferreras para desconectar: ver la serie Amar es para siempre junto a su suegra, Paquita, siempre que puede. “Confirmo, es verdadero, pasa el fact checking”, ha afirmado Pastor, a quien la presentadora le ha pedido una fotografía o vídeo para poder ser testigo de ese momento tan peculiar.

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