Uno de los castillos más impresionantes de España: está en lo alto de un pueblo e incrustado en una roca

El legado de la Edad Media está muy presente todavía en España gracias a los castillos. Nuestro país alberga alrededor de 10.300 fortalezas, según los datos de la Asociación Española de Amigos de los Castillos. Y los tenemos de todos los tipos: desde uno circular (el de Bellver en Palma de Mallorca), pasando por otro ubicado en la playa (el de Macenas en Mojácar), hasta varios incrustados en una roca. Precisamente uno de estos últimos es el protagonista de este artículo: el castillo de Guadalest o de San José.

Esta impresionante fortificación se sitúa en lo alto de un peñasco en uno de los pueblos más bonitos de España: El Castell de Guadalest. Por ende, sus vistas son de película: las personas que los visitan se deleitan con el magnífico paisaje de las sierras de Xortà, Serrella y Aitana.

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El castillo de San José fue construido en el siglo XI por los musulmanes en un lugar estratégico: el punto más alto del pueblo de El Castell de Guadalest. Gracias a su ubicación tuvo un papel clave en la defensa y vigilancia de la zona durante la Edad Media y los siglos posteriores.

No obstante, diferentes sucesos históricos deformaron su estructura. Primero los terremotos de 1644 y más tarde una voladura en 1748 durante la Guerra de Sucesión diezmaron sus murallas y torres. Hoy en día, solo queda en pie parte de las murallas, pero a pesar de ello, los restos medievales dibujan una imponente silueta y merecen una visita.

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Tal y como señala la web de Turismo de la Comunitat Valenciana, el castillo se puede visitar en horario de invierno de lunes a domingo de 10:00 h a 18:00 h, siempre teniendo en cuenta que de jueves a domingo permanece cerrado al mediodía, de 14:00 h a 15:00 h. En verano, su horario de apertura se amplía una hora más, cerrando sus puertas a las 19:00 h.

El precio de la visita es de 4 euros para aquellos visitantes que paguen la entrada general. Si se va en grupo, el boleto individual tiene una rebaja y su precio final es de 3 euros. Además, con el tique también se accede a la Casa Orduña. Este es el museo municipal, una casa construida por la familia noble de los Orduña tras el gran terremoto de 1644. En su interior se conoce de primera mano cómo era una casa de la época, así como pinturas históricas, colecciones de cerámica, obras religiosas y exposiciones temporales.

En el ámbito cultural, la Casa Orduña no es el único referente de la localidad. Y es que este pueblo de solo 258 habitantes (datos del INE) alberga otros siete museos, alguno de ellos muy curioso:

• Museo Belén y Casitas de Muñecas: un establecimiento adosado a una roca que guarda la obra de Antonio Marco, un reputado artista, maquetista, belenista y coleccionista. En su interior hay casitas de muñecas, un belén ecológico y juguetes antiguos, según informa la web del ayuntamiento del municipio.
• Museo Colección Vehículos Históricos Valle de Guadalest: 140 motocicletas y varios microcoches originales de los años comprendidos entre 1920 y 1970.
• Museo Microminiaturas: su nombre hace una clara referencia a su contenido. En él hay monumentos o eventos históricos representados en miniatura. Por ejemplo, la Estatua de la Libertad dentro del ojo de una aguja.
• Museo Saleros y Pimenteros: 20.000 piezas originales de todo el mundo de saleros y pimenteros. Solo hay otro museo como este en el mundo y está en Tennessee (EEUU).
• Museo Etnológico: el museo que debes visitar si quieres conocer a fondo la historia y la vida de los habitantes de El Castell de Guadalest.
• Museo Histórico Medieval: una colección muy completa de instrumentos de tortura.
• Museo Microgigante: un espacio similar al del Museo Microminiaturas, pero que recoge las obras del artista Manuel Ussá. Entre sus trabajos hay una plaza de toros en una cabeza de un alfiler o el libro de la Biblia en un cabello.

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Además del castillo de San José, este municipio alberga el castillo de la Alcozaiba. Es otra fortaleza del siglo XI de origen musulmán de la que en la actualidad solo queda una torre en ruinas. También está incrustada en la roca, por lo que su aspecto es muy llamativo

Pero no solo brillan sus castillos y museos. La iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción, construida entre 1740 y 1753 y remodelada posteriormente en varias ocasiones, es una parada recomendada. En este sentido, tiene un retablo con 10 cuadros históricos, entre ellos La Anunciación, el Nacimiento de Jesús y la Huida de Egipto.

Por otro lado, el espectacular entorno natural de los alrededores ofrece a los senderistas rutas de gran belleza. Las más importantes son las dos siguientes:

• Ruta PR-V-18, El Castell de Guadalest - Cumbre de Xortà: recorrido de 15,8 kilómetros en subida que atraviesa bosques mediterráneos y pistas forestales hasta llegar a la cumbre del Cerro de los Parados (1.218 metros de altitud).
• Ruta PR-V-19, El Castell de Guadalest - Castell de Castells: mismo trayecto que la PR-V-18 hasta la loma Blocón. Después se desvía para llegar a la población de Castell de Castells. Allí se recomienda visitar la zona de los “Arcs”, la Cova del Somo previa petición al ayuntamiento y la fuente de los Tejos. La ruta tiene una longitud de 13 kilómetros y es en subida.

Desde Alicante, el trayecto en coche tiene una duración aproximada de 55 minutos. Hay tres opciones de carreteras. En primer lugar, combinar la AP-7 y la CV-70. En segunda instancia, añadir la A-70 a las dos anteriores. Y, por último, optar exclusivamente por la AP-7 aunque el tiempo total del recorrido puede incrementarse en 10 minutos.