Estos son los únicos distritos de Barcelona en los que alquilar piso cuesta menos de 1.000 euros al mes

El precio del alquiler está por las nubes en la capital catalana. El metro cuadrado roza los 16 euros de media y las familias cada vez tienen más dificultades para encontrar un piso digno en Barcelona. Hace un año, las rentas superaron la barrera psicológica de los 1.000 euros y desde entonces, la curva no ha dejado de crecer. Este es el quinto trimestre consecutivo en el que los precios del alquiler se sitúan por encima de las cuatro cifras en la Ciudad Condal y los expertos advierten de que las previsiones no son, al menos de momento, positivas.

Los últimos datos publicados por el Institut Català del Sòl (Incasol) no dejan lugar a la duda. El organismo, dependiente de la Generalitat de Catalunya, elabora los informes a partir de las fianzas que depositan los propietarios —normalmente, por valor de una mensualidad—, de modo que reflejan el precio realmente pactado entre arrendadores y arrendatarios en los contratos formalizados cada tres meses. La tabla más reciente, con los datos de julio, agosto y septiembre, evidencia un nuevo récord en las tarifas del mercado inmobiliario en la capital catalana.

Te puede interesar: Este es el único distrito de Madrid en el que alquilar un piso cuesta menos de 1.000 euros al mes

Los costes de la vivienda en suelo barcelonés han crecido cerca de un 50% en los últimos 16 años, según el citado organismo. Por si fuera poco, el tercer trimestre del año ha dejado un nuevo máximo histórico, con una renta media de 1.171,28 euros mensuales en la Ciudad Condal. Los contratos formalizados entre julio y septiembre se han encarecido un 11,4% con respecto al mismo período de 2022. Esta tendencia al alza no solo supone un problema en la capital, sino que se mantiene en toda Catalunya, donde los precios de los nuevos contratos superan la media de los 829,61 euros al mes, un 8% más que hace dos años.

La brecha por distritos es cada vez más pronunciada. Los últimos datos publicados por Incasol son cuando menos reveladores: solo tres barrios tienen ofertas por debajo de los 1.000 euros mensuales. Los alquileres más bajos están en Nou Barris (804,80 euros), Horta-Guinardó (922,27 euros) y Sant Andreu (940,71 euros). El distrito más caro ha vuelto a ser Sarrià-Sant Gervasi (1.668,84 euros), que acumula varios meses consecutivos de subidas. La renta ha subido un 7,4% con respecto a los tres meses anteriores.

La barrera de los 1.000 euros la superan también otros seis distritos: Les Corts (1.363,33 euros al mes), El Eixample (1.292,65 euros al mes), Gracia (1.148,96 euros al mes), Sant Martí (1.138,06 euros al mes), Ciutat Vella (1.104,91 euros al mes) y Sants-Montjuïc (1.027,58 euros al mes). Los datos se obtienen a partir de las fianzas que los propietarios depositan ante el Institut Català del Sòl, de modo que reflejan el precio realmente pactado entre los arrendadores y los inquilinos en los contratos formalizados durante los meses de julio, agosto y septiembre. La vivienda en Barcelona es cada vez más cara y las dificultades para encontrar piso se agudizan, sobre todo entre las familias y la población joven.