El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha dado a conocer este jueves los datos del balance de siniestralidad vial correspondiente al 2023, año en el que se registraron un total de 1.145 fallecimientos en las carreteras españolas, tres menos que en 2022. La cifra que se dispara es la de motoristas fallecidos, que pasa de 254 a 299.
Grande-Marlaska ha calificado este aumento de la siniestralidad entre el colectivo de motoristas como “un auténtico disparate”. Interior no ha querido esperar y ha anunciado la implantación de un curso que tendrán que realizar aquellos conductores con permiso B y tres años de antigüedad que quieran conducir motos de hasta 125 centímetros cúbicos.
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Esta es una de las medidas que el departamento dirigido por Grande-Marlaska y la Dirección General de Tráfico (DGT) van a tomar para el colectivo de motoristas, “uno de los que más preocupa”. Tráfico actualizará el contenido de los cursos de recuperación de puntos con el objetivo de incorporar un perfil específico para los motoristas que han perdido la totalidad de su saldo. Asimismo, será obligatorio en carretera el uso del casco integral o modular y los guantes homologados.
El 2023 acabó con 1.145 fallecidos en las carreteras españolas en un total de 1.148 siniestros con víctimas mortales. Se trata de una cifra prácticamente similar a la contabilizada en 2022 pese al aumento de un 2 % en los desplazamientos de largo recorrido. “Hemos tenido más desplazamientos que en 2022 y no ha habido más fallecidos que en 2022. Son malos datos, como lo son todos los años, pero es necesario contextualizarlos para adoptar las medidas necesarias y corregirlos en lo posible”, ha subrayado Grande-Marlaska.
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Con dicho incremento de los desplazamientos el 2023 se convierte en el año con mayor movilidad en las carreteras desde 2014, aunque el quinto por la cola en siniestralidad desde ese mismo año.
138 víctimas sin cinturón de seguridad
Entre los datos del balance de siniestralidad vial de 2023 también llama la atención el número de fallecidos que no llevaban puesto el cinturón de seguridad, un total de 138. Además, ocho de los motoristas que perdieron la vida no llevaban casco, accesorio que tampoco portaban nueve de los ciclistas fallecidos.
La salida de vía continúa siendo el tipo de siniestro que más víctimas mortales deja con 486 personas, el 42 % del total de muertes. En cuanto al tipo de vía, las convencionales también se mantienen como las más mortales con el 74 % de las muertes.
En la mayoría de los accidentes por salida de vía el conductor iba solo y ocurrían principalmente por la noche o después de comer. Grande-Marlaska ha recordado que los españoles duermen un 10 % menos que la media europea, lo que ha calificado de problema de salud pública.