La fiesta ‘rave’ que empezó en Fuente Álamo, Murcia, en la última Nochevieja y que ha reunido a cerca de cinco mil personas, continuará sin ser desalojada “por razones de seguridad”, según ha confirmado Mariola Guevara, la delegada del Gobierno en la región, en una rueda de prensa este miércoles.
Hasta la fecha, la situación ha permanecido relativamente controlada, sin incidentes significativos, excepto por algunas detenciones menores vinculadas a la tenencia de sustancias ilícitas. La Guardia Civil está llevando a cabo operativos para restringir el acceso al lugar, situado en un circuito de carreras que fue ocupado clandestinamente la última noche de 2023. Se ha decretado un dispositivo en el que quien abandone el área de la fiesta no podrá regresar en vehículo, quedando la posibilidad de hacerlo a pie a través de rutas no vigiladas, recorriendo, eso sí, varios kilómetros a pie.
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La prioridad de las administraciones locales y del Gobierno, según lo confirmado por la propia Delegación del Gobierno, es mantener el control de la situación, prevenir que más personas se sumen al evento y obstaculizar el acceso a vehículos nuevos.
El operativo de seguridad está reforzado por cien guardias civiles y agentes de policía local, apoyados por drones y un helicóptero que ha sobrevolado el área, proporcionando una contabilidad aproximada de 2.123 vehículos que han accedido al circuito, de los cuales 500 ya lo han dejado.
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La mayoría de las sanciones impuestas han sido administrativas, aunque también se han realizado pruebas de alcoholemia y detección de narcóticos para asegurar la seguridad en las carreteras para aquellos participantes que decidan salir del evento en coche.
Las autoridades prevén que la concentración termine el próximo fin de semana; sin embargo, se estima que si la fiesta persiste más allá, el número de personas irá disminuyendo de forma paulatina, por lo que, en caso de querer desalojar en los próximos días, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado contarán con cierta ventaja.
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Juana María Martínez, alcaldesa de Fuente Álamo, ha explicado que la situación actual y el estado de los asistentes, bajo posibles efectos de sustancias, incrementan significativamente el riesgo de un desalojo forzoso, razón por la cual se ha desaconsejado esta acción.
En relación con las condiciones del circuito, la alcaldesa ha admitido el deterioro de la superficie de rodaje debido al paso del tiempo, aunque ha asegurado que los boxes se mantienen en buen estado gracias a obras recientes. Además, ha mencionado que el ayuntamiento está en proceso de gestionar un proyecto para asfaltar nuevamente la pista y restaurar su plena funcionalidad.
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