La Seguridad Social te baja la pensión de incapacidad permanente en estos casos

Hace apenas unas horas que ha comenzado el nuevo año y, como es habitual, esto viene acompañado de cambios en España. A partir del 1 de enero de 2024, hay novedades en materia económica: las prestaciones contributivas subirán un 3,8%, conforme al IPC medio anual entre diciembre de 2022 y noviembre de 2023. Esta fue una de las principales medidas que adoptó José Luis Escrivá al frente del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, ahora liderado por Elma Saiz. A ello se une el incremento de entre un 5 y un 7% de las cuantías mínimas. Pero, quienes estén cobrando una pensión de incapacidad permanente con el complemento a mínimos deben prestar especial atención porque podría reducirse la cantidad de dinero que reciben en ciertos casos.

Un total de 135.380 personas, es decir, el 14,32%, que obtienen una pensión de incapacidad, perciben el complemento a mínimos para alcanzar la cuantía mínima, tal y como indican los datos del Instituto Nacional de la Seguridad Social. Este complemento se sitúa, de media, en los 148,47 euros al mes.

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Por tanto, esta asignación económica se suma a la pensión contributiva cuando esta no alcanza un umbral mínimo y, por ende, está por debajo de las cuantías mínimas que fija la legislación española. De esta forma, ayuda a aumentarla, pero a esto solo pueden acceder las personas jubiladas que cumplen determinados requisitos por lo que, cuando dejan de reunir esas condiciones, la Seguridad Social puede retirar la prestación.

La Seguridad Social deja claro cuáles son los requisitos necesarios para poder acceder al complemento a mínimos que garantiza que las pensiones estén por encima de la cuantía mínima. Así, tienen derecho a recibirlo los pensionistas por incapacidad permanente que perciban cantidades inferiores al mínimo y no tengan ingresos adicionales significativos. Para 2024, se establece un límite de ingresos de 8.614 euros anuales para las personas sin cónyuge a cargo, y de 10.048 euros anuales en caso de contar con un cónyuge dependiente.

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A su vez, para mantener el derecho al complemento es esencial cumplir con esos requisitos de manera anual, ya que la ayuda no es acumulativa y se somete a revisión cada año. La Seguridad Social advierte de que, si en algún período no se reúnen las condiciones exigidas, puede ser retirado, lo que provocaría que la pensión sea inferior al mínimo fijado. Por ello, aquellos beneficiarios que prevean superar los límites de ingresos deben informar al organismo público.

Por otro lado, la Seguridad Social señala que los pensionistas no necesitan realizar ninguna gestión ni comunicado proactivo, salvo en caso de que esperen recibir ingresos que sobrepasen los umbrales establecidos. Estas indicaciones pretenden simplificar el proceso para los pensionistas y asegurar la transparencia en el acceso al complemento a mínimos.

El Gobierno de España ya anunció un incremento del 22% en las pensiones de incapacidad permanente a partir del 1 de enero, lo que afecta directamente a los pensionistas que se beneficiarán de manera automática de esta subida, sin necesidad de gestiones adicionales. Asimismo, se producirá un ajuste en las prestaciones no contributivas por invalidez, que esta previsto que suban progresivamente hasta alcanzar el 75% del umbral de pobreza en 2027.

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Este aumento tiene como objetivo hacer frente a la situación actual, en la que más del 50% de estos pensionistas obtienen menos dinero que el salario mínimo. En concreto, la pensión mínima de incapacidad permanente total o absoluta, con un cónyuge a cargo, pasará de 966,20 euros a 1.178,50 euros mensuales, lo que suponen 212,30 euros más al mes. Por su parte, las pensiones no contributivas experimentarán dejarán atrás los 484,61 euros actuales hasta llegar a 592 euros al mes.

La política de ajuste de las pensiones se basa en parámetros concretos; las pensiones contributivas por incapacidad permanente se alinearán con el 20% de la renta media para 2024. Con estas medidas, el Ejecutivo de Pedro Sánchez procura minimizar las desigualdades que sufren los pensionistas y mejorar así su calidad de vida.