Marvel arremete contra Isabel la Católica y fomenta la leyenda negra española en su última serie

Parece que a Marvel no le gusta mucho España. O al menos eso es lo que se ha encargado de demostrar en sus últimas producciones, en las que ha hecho especial hincapié en representar a los españoles como personas despiadadas y crueles, especialmente a través de la época de la colonización de América y los conquistadores españoles. Este pasaje de nuestra larga historia, que ha sido el centro de muchas discusiones y polémicas a lo largo de los años, ha vuelto a repetirse en la última serie del Universo Cinematográfico Marvel, en la que ha llegado a hacer acto de presencia hasta la mismísima Isabel la Católica.

Se trata de la última producción de Marvel Studios que ha visto la luz, la segunda temporada de la serie ¿Qué pasaría si...?, en la que se presentan historias alternativas con los personajes de Marvel que ya conocemos y alguno que otro nuevo. Precisamente en el sexto episodio se nos presenta a Kahhori, una joven mohawk que descubre unas misteriosas aguas dentro del Lago Prohibido, sin saber que le darán superpoderes y que le llevarán al Mundo Celestial con sus atepasados y miembros de otras tribus. Sin embargo, el capítulo presenta también a los antagonistas de la historia, los conquistadores españoles, comandados por las órdenes de la reina Isabel la Católica, que aparece hacia el final del episodio.

Tras descender al Mundo Celestial, Kahhori se da cuenta de que ha adquirido grandes superpoderes, pero también que no puede regresar al mundo terrenal y rescatar así a su tribu de la invasión española a pesar de sus poderes. Cuando las tropas españolas asentadas en el terreno y lideradas por un tal don Rodrigo Alfonso Gonzolo, un cruel comandante que se dedica a masacrar la tribu de Kahhori e interrogarlos hasta descubrir el paradero del Lago Prohibido, que para ellos representa la Fuente de la Juventud. Si bien este hecho podría inspirarse en la leyenda del explorador español Ponce de León y su supuesta búsqueda de una Fuente de la Juventud en la isla de Puerto Rico, hay varios aspectos e inexactitudes históricas que no han hecho ninguna gracia a espectadores españoles, que no han dudado en defenderse después de que Marvel siga dando tan mala imagen de la historia y la cultura española.

El tema del Imperio Español y la leyenda negra que se le atribuye ya ha aparecido tanto en Eternals como en Black Panther: Wakanda Forever, en la que alteraron el origen del personaje de Namor para asociarlo con la caída de la civilización maya y de nuevo culpar a los españoles del sufrimiento y las desigualdades que vivieron. La de ¿Qué pasaría si...? ha sido la última de ellas, y ha terminado de hacer explotar a mucha gente, incapaz de comprender por qué Marvel se empeña en representar de esta manera a los españoles, especialmente cuando hubo colonizadores y conquistadores de otros países.

Lo cierto es que, en el caso de la tribu mohawk que describe la serie, España no tuvo absolutamente nada que ver, pues históricamente el Imperio Español jamás llegó tan al norte de América, y sí los colonos ingleses y holandeses, de los que la serie no hace mención alguna. Este un aspecto que no han dudado en reprocharle algunos usuarios a Marvel, dirigiéndose directamente a la creadora y guionista de la serie para que diera alguna explicación de lo ocurrido. “Me ha gustado el capítulo, pero lo único que me choca es que hayan puesto soldados españoles cuando nunca llegaron a Nueva York, sino que realmente a esa zona fueron los británicos y los propios holandeses los que colonizaron el territorio”, señalaba un usuario.

“¡Tienes razón! Pero en este universo, los rumores sobre el teseracto y el lago prohibido llegaron a Europa, así que los que buscaban la Fuente de la Juventud empezaron a buscar en Nueva York y no en Florida”, justificaba A.C. Bradley, creadora y guionista de la serie. De lo que comenta Bradley no se hace mención alguna, más allá de que se entienda que la serie presenta universos y dimensiones alternativas a las que conocemos. No obstante, la aparición de la Reina Isabel la Católica en el Alcázar de Segovia no difiere mucho con la realidad, aunque sí la manera de representarla: de nuevo como un personaje cruel, egoísta y con ansias de poder. Se ve que en esa realidad no es una monarca preocupada por los derechos de los indígenas, tal y como sucedió en la historia real, hasta el punto de ser una de las principales encargadas en desarrollar las llamadas Leyes de Burgos -promulgadas en 1512 tras la muerte de la monarca-, la primera declaración de derechos humanos en la historia que abogaba por el buen trato hacia los indígenas y sobre la que se cimentaría la abolición de la esclavitud y buena convivencia con las tribus de América, que acabaría dando lugar al posterior mestizaje.