Adquirir una vivienda para ponerla en alquiler es una opción cada vez más interesante tanto para pequeños como para grandes propietarios debido a la subida de su rentabilidad, que este año ha alcanzado el 6%, un punto porcentual más que en 2022.
Estos retornos han hecho que durante 2023 haya aumentado un 5% interanual el número de inversores españoles en inmobiliario, porcentaje que ha subido hasta el 12% en el caso de los inversores extranjeros, cuyo apetito por este sector va a más, según indican fuentes de la plataforma tecnológica de inversión inmobiliaria Inviertis.
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Y son los inversores de origen latinoamericano los que mayor protagonismo han concentrado entre los foráneos en zonas prime, mientras que en el resto de las zonas el liderazgo es para los británicos, seguidos de franceses y alemanes.
El aumento de la inversión en el sector inmobiliario se ha producido en un contexto marcado por la Ley de Vivienda. Y es que, a pesar de que ninguna comunidad autónoma ha empezado a aplicarla, ha generado una “inestabilidad regulatoria que ha provocado una ralentización de las transacciones”, reconocen desde Inviertis. Otro factor a tener en cuenta es que la subida de tipos de interés y, con ella, el encarecimiento de las hipotecas, ha sacado del mercado al comprador medio.
Previsiones al alza para 2024
Las previsiones de inversión en el sector inmobiliario para el próximo año son positivas, a juicio de los analistas, que esperan un comportamiento resiliente de los inversores, su menor necesidad de financiación hipotecaria y el regreso consolidado del comprador o inversor extranjero. Otras de las claves que influirá en el comportamiento del sector será la gestión que se haga del mercado inmobiliario desde las administraciones públicas.
“Nuestro sector estará marcado por las políticas del nuevo Gobierno y su capacidad de otorgar seguridad y estabilidad a los inversores. Las medidas en materia de vivienda no parece que vayan a ser tan agresivas como las que se han planteado en 2023, por lo que cabe esperar que la inversión en 2024 vuelva a niveles de 2021 o 2022″, vaticina Rebeca Pérez, CEO y fundadora de Inviertis.
Considera que, pese a que el inversor ha seguido comprando por su solvencia y por no necesitar financiación para adquirir propiedades, no se ha recuperado el volumen de transacciones que se esperaba a finales de año “tras los vaivenes” para la formación del nuevo Gobierno.
“Se habla de una corrección de precios que aún no se ha producido, por lo que numerosos inversores pequeños están a la espera de ello. Cabe esperar que muchos se lancen a por esas oportunidades en 2024 y puedan ver aumentada la rentabilidad de las operaciones, que en estos momentos se sitúa en un 6%”, asegura la experta.
El atractivo del inmobiliario
También Vicenç Hernández Reche, economista y CEO de Tecnotramit, prevé que el mercado llegará a un punto de inflexión en el momento en el que los tipos de interés empiecen a bajar, ya que “supondrá un alivio financiero para las familias que quieren acceder al mercado de compra”.
El experto incide en que el abaratamiento de las hipotecas “supondría un aumento de la demanda y, por ende, de la valoración de los activos, haciendo más atractiva la inversión inmobiliaria en relación con otras alternativas”.