El pequeño pueblo en la frontera con Portugal que es uno de los más bonitos de España

Cáceres es una de las regiones de España donde el viajero puede disfrutar de una naturaleza inconmensurable. En ella se pueden contemplar paisajes que son una belleza y que constituyen uno de los mejores destinos rurales de nuestro país. A esto se le suman la infinidad de pueblos que salpican estos parajes, los cuales mantienen la esencia histórica y cultural de la zona. Uno de los más pintorescos es Trevejo, que incrustado en el corazón de la Sierra de Gata, es uno de los más bonitos de España.

De hecho, la conocida Lista de los pueblos más Bonitos de España ha incluido a esta villa en su prestigiosa selección. Así, pasará a 2024 a formar parte de ella, siendo una de las cinco localidades en conseguirlo. A Trevejo le acompañan la localidad malagueña de Parauta, junto con Ampudia (Palencia), Comillas (Cantabria) y Trujillo (Cáceres). De esta forma, ascienden a 116 los municipios que cuentan con este galardón, el cual pone en valor el patrimonio histórico, cultural y natural de cada uno de ellos.

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Perteneciente al municipio de Villamiel, Trevejo ha sido históricamente un punto estratégico importante en la región. Así, su castillo es uno de los monumentos más relevantes y con más historia, pues alrededor del siglo X, los musulmanes levantaron una serie de fortalezas en la sierra de Gata. Entre ellas se encontraba la de Trevejo, pues gracias a su enclave permitía controla y defender la zona.

Sin embargo, la construcción que se puede contemplar hoy en día es posterior, del siglo XV, de cuando las Órdenes Militares como las de Santiago y Alcántara dominaban estas tierras. En la Guerra de Sucesión Española, la fortaleza sufrió graves daños, por lo que se tuvieron que hacer reformas.

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A pesar de ello, el castillo se encuentra en ruinas, aunque un plan imprescindible es subir hasta arriba del todo y contemplar los preciosos restos y espectacular paisaje. Pues desde este punto se puede apreciar toda la comarca y las Sierras de Garduño, Albilla, San Pedro y Cachaza. A su vez, las puestas de Sol desde lo alto de la atalaya son, sencillamente, espectaculares.

La pequeña aldea de Trevejo es el claro ejemplo de paisaje, arquitectura e historia que alberga la sierra de Gata. “La huella que dejaron estos pueblos es aún visible en el patrimonio histórico conservado de Villamiel, entre el que destacan su arquitectura típica, el castillo de Trevejo, construido en el siglo XV, y la iglesia de San Juan, que posee tumbas antropomórficas excavadas en roca granitica”. Este último es el otro gran monumento de la villa.

Asimismo, su casco antiguo ha sido declarado Bien de Interés cultural con la categoría de Conjunto Histórico, por su conjunto monumental y arquitectónico. Sus callejuelas permiten conocer una villa enmarcada en la historia donde el viajero puede descubrir rincones de ensueño. Además, dada su cercanía con Portugal, se convierte en un destino ideal para visitar el país vecino y disfrutar de un entorno rural sin igual.

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Desde Cáceres, el viaje es de alrededor de 1 hora y 30 minutos por la carretera A-66. Por su parte, desde Penamacor, en Portugal, el trayecto tiene una duración estimada de 50 minutos por las vías R346 y EX-205.