El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha defendido este viernes la política migratoria de España al asegurar que el despliegue de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en Senegal ha frenado el 46% de las llegadas irregulares a Canarias en los dos últimos meses, con la interceptación de 59 embarcaciones y 7.213 personas en las costas de Senegal y Gambia.
Esos han sido los resultados del dispositivo del avión CN-235 de vigilancia marítima desplegado en Dakar desde el pasado 17 de octubre, al que se sumó durante 45 días otra aeronave en las tareas de patrulla desde Canarias, según ha indicado el ministro desde Las Palmas de Gran Canaria, donde se ha reunido con la comisaria de Interior de la UE, Ylva Johansson, y el presidente de Canarias, Fernando Clavijo, y la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz.
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Grande-Marlaska ha descartado “las soluciones mágicas y los atajos” en política migratoria y ha apostado por la cooperación con los países de origen y tránsito de la migración en la lucha contra las mafias que trafican con personas como la vía de trabajo más eficaz para evitar llegadas ilegales “y, lo que es más importante, para evitar muertes en el mar”, ha añadido.
Ese despliegue de medios se produjo tras el repunte migratorio que ha vivido en los últimos meses las islas Canarias. De hecho, en lo que va de año se han registrado más de 49.000 llegadas de migrantes, por lo que se han superado las cifras de la llamada “crisis de los cayucos de 2006″. Las ONG que trabajan por la defensa de los derechos de los migrantes, reclaman sin embargo al Gobierno que habilite vías legales y seguras para que los migrantes “no se jueguen la vida” tratando de alcanzar las costas españolas, teniendo en cuenta que la ruta canaria es una de las más peligrosas y mortíferas del mundo.
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Varias organizaciones como Irídia y Novact denunciaron recientemente en un informe las numerosas vulneraciones de derechos de las personas migrantes que entraron por esas vías irregulares al Estado español durante los años 2021 y 2022, como la imposibilidad de que puedan pedir asilo en puestos fronterizos o conseguir visados en los países de origen.
Coordinación entre administraciones
El ministro también ha agradecido a Johansson “el enorme trabajo y el esfuerzo” desarrollado por la Comisión para que el fenómeno migratorio en Europa se entienda “como un desafío y no como una amenaza”, y para avanzar hacia un pacto migratorio común. “Los límites fronterizos de España son también las fronteras de Europa, y la migración debe ser una responsabilidad compartida por los 27 Estados miembros y no solo por los países de primera entrada”, ha señalado.
Marlaska ha elogiado la coordinación entre administraciones para gestionar la migración en Canarias y ha destacado la importancia de las cinco reuniones de la Autoridad de Coordinación frente a la Inmigración en Canarias celebradas desde septiembre, que se han convertido, en opinión del ministro, “en un foro de gran utilidad para consolidar y engrasar los mecanismos y procedimientos de colaboración en asuntos migratorios”.