La conocida “granja del terror”, noticia tras unas imágenes en las que aparecían cerdos devorándose entre ellos y cadáveres en descomposición sin ser retirados del interior del recinto, vuelve a los focos principales por una nueva filtración de unas duras imágenes. La hacienda está ubicada en Quintanilla del Coco y es propiedad de Domingo del Pozo Martínez, alcalde del mismo pueblo de Burgos. El Observatorio de Bienestar Animal (OBA), que ha denunciado maltrato animal y un estado insalubre del recinto, vuelve a la palestra con nuevas escenas. En ellas, se puede apreciar cómo un cerdo “dejado a la intemperie que muere de inanición” es devorado por una manada de buitres.
“Las irregularidades encontradas no se limitan a los sucesos dentro de la explotación. Fuera de ella, pegada a la misma verja, y a lo largo de un perímetro de monte de 2.000 metros cuadrados, se abrió paso un vertedero ilegal de huesos, cráneos, columnas vertebrales y cadáveres en descomposición”, asegura el Observatorio de Bienestar Animal tras la difusión de nuevas imágenes durante este miércoles. Los hechos ya han sido puestos en conocimiento de la justicia y entregadas al Seprona, ya que las imágenes fueron captadas entre junio y septiembre de 2023. En la escena se puede ver cómo “un operario lanza varios lechones al suelo” y otro “bebe cerveza y luego vierte parte del botellín encima de los lechones”.
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En las nuevas imágenes, un cerdo vivo se encuentra completamente ensangrentado y es mordido por otros gorrinos más grandes del mismo corral. El nivel de desatención y gravedad de la situación en la granja alcanza su máximo apogeo, al desvelar el procedimiento del granjero para deshacerse de uno de los cerdos. Un cerdo se encuentra a la intemperie fuera de la explotación y se le deja morir de inanición.
Las imágenes captan cómo el cerdo agoniza durante, calcula la organización, al menos 36 horas, “incapaz de levantarse y sin acceso a atención veterinaria, comida o agua”, aseguran. El alcalde de Quintanilla del Coco pasa alrededor del animal varias veces sin inmutarse. Tras morir, el cadáver fue devorado por una bandada de buitres. “El propietario y alcalde del municipio habría estado creando presuntamente un vertedero irregular, acumulando centenares de cadáveres en el monte aledaño a la explotación porcina”, denuncia la OBA.
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Una granja denunciada por maltrato animal
“El monte colindante a la granja desprendía un fuerte olor de manera que acudimos a ver qué estaba ocurriendo. La imagen fue escalofriante: huesos, cráneos, columnas vertebrales y animales en descomposición se amontonaban desde la verja de la misma granja montaña hacia arriba. Pusimos cámaras en los árboles y desvelamos qué el alcalde era quien estaba deshaciéndose de los cadáveres ilegalmente, llevando con su tractor los animales muertos al monte, cuando no le veía nadie”, aseguran los testimonios recabados por el Observatorio.
Estas prácticas podrían contravenir la ley, según lo establecido en el Real Decreto 1632/2011 por el que se regula la alimentación de determinadas especies de fauna silvestre con subproductos animales no destinados a consumo humano y en el Decreto 17/2013, por el que se desarrolla en Castilla y León el uso de determinados subproductos animales no destinados al consumo humano para la alimentación de especies necrófagas de interés comunitario, sin perjuicio de las posibles responsabilidades civiles, medioambientales, penales o de otro orden que pudieran concurrir.
Esta misma granja ya fue denunciada hace unas semanas por maltrato animal después de unas duras imágenes en las que se apreciaban cerdos con hernias y deformidades, cadáveres de animales en descomposición y lechones agónicos sin asistencia veterinaria en la granja donde unos 5.000 cerdos viven en condiciones insalubres.