Futuro Vegetal se define como “un colectivo de desobediencia civil y acción directa que lucha contra la crisis climática mediante la adopción de un sistema agroalimentario basado en plantas”. Sus activistas han protagonizado múltiples protestas y teñido de de pintura roja y negra las sedes del PP y PSOE, entre otras instalaciones públicas y privadas. Ahora, la Policía Nacional considera a este grupo una organización criminal, delito por el que investigan a cuatro activistas detenidos el pasado fin de semana en la capital.
Los arrestos, dos el viernes y otros tantos el domingo, fueron efectuados por los agentes de la Brigada Provincial de Información de Madrid en el marco de una investigación cuyo origen no ha trascendido. Según confirman fuentes de la Jefatura de la Policía Nacional a Infobae España, cuatro integrantes de Futuro Vegetal fueron detenidos por un delito de pertenencia a organización criminal. Una activista fue arrestada en un bar, mientras que los otros tres se presentaron de forma voluntaria en la comisaría del distrito de Moratalaz tras recibir una llamada de los agentes. Todos se negaron a declarar y, posteriormente, quedaron en libertad, aunque continúan siendo investigados.
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De hecho, desde Futuro Vegetal creen que los agentes de la Policía Nacional, que tenían identificados a los activistas por acciones anteriores en las que fueron detenidos, intervinieron al sospechar que podían estar planeando algún tipo de protesta con motivo de la celebración de la Cumbre del Clima. Bilbo Bassaterra, miembro del colectivo y abogado de profesión, opina en declaraciones a Infobae España que la investigación por un delito de pertenencia a organización criminal a sus compañeros pretende “asustar” a Futuro Vegetal y “poder vulnerar más derechos” de los activistas en futuras actuaciones.
Penas de hasta ocho años de prisión
El artículo 570 bis del Código Penal señala que se entiende por organización criminal “la agrupación formada por más de dos personas con carácter estable o por tiempo indefinido, que de manera concertada y coordinada se repartan diversas tareas o funciones con el fin de cometer delitos”. Así, prevé penas de hasta ocho años de prisión para sus líderes o componentes según la gravedad de tales infracciones penales. Hasta la fecha, los principales delitos que los agentes han atribuido a los integrantes de Futuro Vegetal son los de daños, desórdenes públicos y resistencia y desobediencia a la autoridad.
🔴 ACTUALIZACIÓN: LA REPRESIÓN CONTINUA🔴
— FuturoVegetal🍒 (@FuturoVegetal) December 3, 2023
Hoy han sido llamadas a declarar otras dos activistas, acusadas también por pertenencia a ORGANIZACIÓN CRIMINAL.
Tras 2 horas de detención, todas están libres con cargos.
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Desde Futuro Vegetal destacan que ninguno de sus integrantes ha sido condenado por acciones en las que representaban al colectivo. “Ninguno de nuestros compañeros ha sido condenado por acciones de Futuro Vegetal”, subraya Bilbo Bassaterra. Por esa razón cree que la imputación de un delito de organización criminal a los cuatro activistas detenidos el pasado fin de semana responde a la “ofensiva” de las autoridades contra sus protestas.
Así lo denunciaron cuando la Fiscalía incluyó en su memoria anual las acciones de Futuro Vegetal y Extinction Rebellion en el capítulo de terrorismo por las “amenazas” que constituían. Después, el Ministerio Público aclaró que no consideraba a dichos colectivos como organizaciones terroristas.
A raíz de las últimas detenciones, Futuro Vegetal convocó la tarde de este lunes concentraciones en numerosas subdelegaciones del Gobierno “contra la criminalización del movimiento ecologista” y bajo el lema “Si la lucha por la vida es un crimen, yo también soy criminal”.