¿Puedes seguir cobrando el paro o un subsidio si te toca la Lotería de Navidad?

Los españoles, cuando compran un décimo de la Lotería de Navidad, lo hacen con la esperanza de ganar uno de los premios más elevados. El 22 de diciembre, todas las miradas están puestas en los niños y niñas del Colegio de San Ildefonso, que tienen el destino de cientos de familias entre manos. Las administraciones reparten este año 2.590 millones de euros, no obstante, son muchos los ciudadanos que se quedarán con las manos vacías después del sorteo. La probabilidad de ganar un premio en la Lotería de Navidad es del 15,304%, aunque el porcentaje se reduce si reparamos solo en El Gordo, dotado con 400.000 euros por décimo.

Las colas y la ilusión para hacerse con el décimo ganador son evidentes desde hace semanas. Los jugadores sueñan con abrazar sus principales metas: comprar una casa, viajar al otro lado del mundo, reducir la jornada laboral y terminar de pagar una hipoteca. Estas son algunas de las aspiraciones, pero muchas veces los objetivos son más humildes: aumentar los ingresos mensuales, pagar la universidad y dejar atrás situaciones de vulnerabilidad. Los trabajadores que cobran el subsidio por desempleo, también conocido como paro, dibujan uno de los colectivos más afortunados si consiguen hacerse con alguno de los premios de la Lotería de Navidad. Pero, ¿pueden perder la prestación?

Te puede interesar: ¿Es más probable ganar el Gordo de la Lotería de Navidad o la Bonoloto?

El Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) ha advertido de que algunos premios pueden superar el límite de ingresos mensuales establecido, aunque no todo son malas noticias y cada subsidio tiene sus particularidades. Los jugadores agraciados con la Lotería de Navidad pueden seguir cobrando el paro. El ingreso del premio se realiza de forma extraordinaria, en un momento puntual, por lo que no condiciona en absoluto la percepción de este subsidio, vital para muchas familias que no pueden llegar a final de mes. La prestación contributiva por desempleo no exige un límite de ingresos mensuales. Los beneficiarios solo tienen que demostrar que han cotizado, al menos, un año.

Los trabajadores que han sido expulsados del mercado laboral y cobran el paro tienen que acreditar, como mínimo, un año cotizado. El premio Gordo y los ingresos derivados de la Lotería de Navidad son perfectamente compatibles con esta prestación, puesto que no influyen las rentas ni los ingresos extraordinarios. Los ciudadanos que disfrutan, por ejemplo, de una beca, tampoco verán afectada su asignación. Los subsidios por desempleo, en cambio, siguen un patrón diferente.

Los beneficiarios de alguna de las prestaciones complementarias, como el subsidio para mayores de 52 años y el Ingreso Mínimo Vital (IMV), pueden perder la asignación pública si ganan un premio de la Lotería de Navidad. Este tipo de subsidios contempla un límite máximo de 810 euros mensuales que los beneficiarios no pueden superar. El SEPE congelará el pago de la prestación a partir del primer mes en el que se supere el límite de ingresos, pero en cuanto las rentas vuelvan a están por debajo del tope establecido, los trabajadores podrán solicitar la reactivación. Los ganadores tienen un plazo de 30 días para avisar a la administración de cualquier cambio en su situación, además, tienen que rendir cuentas con la Agencia Tributaria.