Telefónica ha informado a los sindicatos UGT, CCOO y Sumados-Fetico su intención de acometer un plan de salidas vía expediente de regulación de empleo (ERE) en cada una de las empresas del grupo: Telefónica España, Telefónica Móviles y Telefónica Soluciones, al que podrían acogerse entre 2.500 y 5.000 trabajadores.
La dirección de la teleco planteó la propuesta a los representantes de los trabajadores en la mesa negociadora del nuevo convenio colectivo que se celebró en la tarde del lunes. Esta propuesta no ha convencido a los sindicatos, que han instado a la operadora a que antes de acometer un nuevo ajuste de plantilla “apueste por la internalización de servicios y el reciclaje profesional con el fin de darle empleabilidad a la plantilla”.
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La compañía no ha explicado las condiciones del ERE. Los detalles y su negociación corresponden a las mesas que cada uno de los Comités Intercentros deberán constituir según los plazos legales marcados.
III Convenio Colectivo de Empresas Vinculadas (CEV)
Según fuentes de UGT, cualquier plan de salidas estará ligado a la firma de un nuevo Convenio Colectivo de Empresas Vinculadas (CEV) con una duración mínima de 3 años, que blinde a la plantilla y sus condiciones laborales y económicas. Todo ello “sin menoscabo de que las personas que puedan estar afectadas por el ERE dispongan de garantías y condiciones similares a los planes de salidas anteriores”.
Respecto al convenio, UGT señala en un comunicado que concibe el debate y la confrontación de ideas como una parte esencial de la negociación colectiva, sin embargo, y a falta de conocer el detalle de los planteamientos realizados por la empresa, “podemos adelantar que nuestras posturas están alejadas” si la operadora propone acometer “planes de medición de productividad, la revisión de la clasificación profesional, abordar una regulación sobre trabajos programados, el control del absentismo, un nuevo modelo de movilidad geográfica y funcional o plantear la revisión del régimen de garantías”.
Líneas rojas del convenio
El sindicato ha marcado sus líneas rojas a la hora de negociar el convenio colectivo. Entre ellas destaca la estructura salarial, el régimen de garantías o la cláusula de revisión salarial que permite a los trabajadores mantener su poder adquisitivo y que, según UGT, no son negociables.
Además, apuesta por incluir mejoras como: una póliza de reembolso dental para toda la plantilla, la ampliación de beneficios sociales, la mejora del teletrabajo, la ampliación de los permisos; jornada de 35 horas semanales; potenciar los fondos sociales y mejoras en comercial, operaciones, formación o igualdad. Además de proyección profesional en los grupos laborales y adecuación de los niveles inferiores desposicionados.
Los sindicatos también han propuesto la paralización de los movimientos para el 1004 y los ocasionados por el cierre de edificios. Hacen referencia a la negociación que la patronal y los sindicados vienen realizando relacionada con el cierre de 108 centros de “baja ocupación” repartidos por “toda España” en el marco de su plan de racionalización de edificios que significaría la reubicación de 266 empleados.
El cierre de estos centros de “baja ocupación” están ligados a un escenario marcado por transformaciones como el apagado de la red de cobre por parte de la compañía previsto para 2024, la robotización y la automatización.
Otro tema que está en negociaciones es la reorganización del servicio de atención al cliente de Telefónica, cuya pieza central es el teléfono 1004. Sobre este tema, se ha planteado que los casi 300 empleados ligados a este departamento, encuadrado en el área de B2C (relación con clientes), pasarán al de B2B, encargado de atender las solicitudes de pymes.
Sindicatos y patronal se reunirán nuevamente el próximo jueves día 30 para seguir negociando el convenio colectivo.