La Guardia Civil ha abierto una investigación interna para esclarecer el origen de las prendas del uniforme oficial del instituto armado que portan varios inmigrantes en las inmediaciones del Centro de Internamiento Temporal de Inmigrantes (CETI) de Ceuta en una fotografía que se ha viralizado en redes sociales.
Según han indicado a Infobae España fuentes de la Guardia Civil, los inmigrantes que aparecen en la foto ya han sido identificados y se les han requisado los uniformes del instituto armado. Los agentes de Información de la Comandancia de Ceuta les preguntaron por el origen de las prendas y ellos manifestaron que las habían recogido de un contenedor de basura de la ciudad.
Te puede interesar: Los guardias civiles denuncian ante Trabajo que les compran botas, polos y pantalones de peor calidad
Cabe recordar que entregar prendas oficiales a personas ajenas al cuerpo o deshacerse de ellas sin haberlas destruido son conductas castigadas en el régimen disciplinario de la Guardia Civil, por lo que ahora el instituto armado trata de averiguar si algún agente pudo incurrir en algún tipo de responsabilidad que le suponga la apertura de un expediente.
De confirmarse la versión de los inmigrantes, los agentes de Información trabajarán en la identificación del funcionario o funcionarios que arrojaron los uniformes al contenedor de la basura para abrirles un expediente disciplinario.
Te puede interesar: Policías y guardias civiles piden a Marlaska un cambio de rumbo al frente de Interior: “Tiene una oportunidad de oro”
Tras difundirse la imagen de los inmigrantes con las prendas de la Guardia Civil, la asociación Jucil denunció a través de sus redes sociales que “mientras nuestros compañeros esperan dos años para que les llegue una prenda, parece ser que a la Guardia Civil y al Ministerio del Interior les importa más que otros ciudadanos deshonren nuestro uniforme y las regalan. ¿Crecerán los delitos denominados “policías full”? Saquen sus propias conclusiones”.
Denuncia por la mala calidad de las nuevas prendas
La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) presentó hace pocas semanas una denuncia en la Inspección de Trabajo y Seguridad Social porque cree que el nuevo contrato licitado por la Jefatura de Asuntos Económicos de la Benemérita, con fecha 5 de noviembre, va a suponer una merma en la calidad de la vestimenta de los agentes del Cuerpo. “Tras comprobar los pliegos de la licitación se observan importantes cambios en diversas prendas (botas, cazadora técnica, pantalón, forro técnico...). Estos cambios van más allá de la mera estética, si no que afectan a la composición y cualidades de las prendas de trabajo”, señala la denuncia.
La Guardia Civil quiere adquirir 14 tipos de prendas y está dispuesta a pagar por todas ellas 10 millones de euros (IVA incluido). “Los requisitos técnicos de los citados artículos han variado de forma sustancial (sobre todo en la bota y el zapato) respecto a las prendas actualmente vigentes y en el resto de artículos hay cambios significativos”, continúa la denuncia. A pesar de los cambios, la AUGC denuncia que los representantes de los trabajadores no hemos sido informados, “incumpliendo con ello la normativa en materia de riesgos laborales”.