Isabel Díaz Ayuso masculló “hijo de puta” este miércoles en el Congreso de los Diputados mientras intervenía Pedro Sánchez. Se encontraba en la tribuna, con otros presidentes autonómicos. Había acudido a escuchar a Alberto Núñez Feijóo. Las cámaras lo captaron y su equipo solo pudo acabar admitiendo la evidencia. Ocurrió en el lugar de la palabra, el Parlamento, en una jornada, el debate de investidura, en la que se echó en falta decoro, principalmente por parte de Vox, que llamó “golpista” al presidente del Gobierno o abandonó el hemiciclo con la sesión en marcha, o que este jueves solo ha acudido a votar, ignorando a EH Bildu, PNV y el Grupo Mixto. La de la presidenta de la Comunidad de Madrid fue una reacción íntima, espontánea, para sí, y desconocía que podría trascender. Y fácil de subsanar quitando hierro o con una disculpa. Pero en este clima político, la dirigente del PP ha considerado que no, huyendo hacia adelante.
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Pese a que su equipo terminó reconociendo, y hasta justificando que “es lo mínimo que se merece Sánchez” -que le llamen “hijo de puta”- Díaz Ayuso ha acusado al presidente de “difamación” por las alusiones que hizo a su persona y a su familia y se ha excusado asegurando que lo que se pudo leer de sus labios fue “me gusta la fruta”. Se encontraba este jueves en la Asamblea de Madrid, donde se ha expresado así, para sorpresa de su oposición. Juan Lobato, al frente del PSOE en la Comunidad, se ha enfadado: “A usted le importa un pimiento la industria, la educación y que haya buenos sueldos en Madrid. Lo único que puede hacer usted hoy aquí es pedirle perdón al presidente del Gobierno por haberle insultado. Se está pasando tres pueblos”.
“Mongola”, “facha”
Este miércoles, Sánchez, en una de sus réplicas a Núñez Feijóo, quiso acordarse de Díaz Ayuso recordando el episodio que acabó con Pablo Casado fuera de la política. Se dirigía por tanto el presidente de Gobierno al del PP cuando pronunció: “Su antecesor alertó sobre un probable caso de corrupción por parte de la presidenta de la Comunidad de Madrid, la señora Ayuso, y su respuesta fue fulminante: evacuar al señor Casado con un golpe de mano y echar por tierra ese caso de corrupción de la señora Ayuso. La aludida se encontraba en ese momento mirando su teléfono móvil, pero no había dejado de escuchar, y fue cuando de sus labios se pudo extraer que dijo “hijo de puta”. Las imágenes, que dejan poco margen a la duda, se viralizaron a los minutos.
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“Pedro Sánchez abusó del poder y utilizó la tribuna de oradores para difamar a un presidente autonómico, es decir, difamarme a mí y a mi familia. A lo mejor ustedes harían otra cosa, pero yo, para mis adentros, sí, dije ‘me gusta la fruta’”, ha explicado Díaz Ayuso desde su escaño. Ironizando, ha recordado momentos en los que ella ha sido la insultada, como cuando Mónica García, líder de Más Madrid, la llamó “mongola” o el también diputado de Más Madrid Pablo Padilla se refirió a ella como “facha”. “Yo entendí ‘me mola’ y ‘qué pacha’”, ha zanjado la presidenta.