La agente de dos jugadoras de la selección española explica cómo vivieron el ‘caso Rubiales’ y lo que significó para el feminismo

Se trata de la agente de Misa Rodríguez y Esther González y una de las mujeres más poderosas en el mundo del fútbol masculino

Guardar
La selección española celebrando el título de campeonas del mundo (RFEF)
La selección española celebrando el título de campeonas del mundo (RFEF)

El ‘caso Rubiales’ todavía sigue dando mucho que hablar y no solo en España, sino en todo el mundo. Un hecho que manchó una gesta histórica de las futbolistas españolas, dado que nunca antes se había conseguido la estrella. Tras este momento, las jugadoras dijeron basta. Basta de las condiciones que venían soportando. Basta de aguantar de determinados comportamiento. Ese momento marcó un antes y un después en el deporte femenino y en el feminismo en general. Ahora, la agente que representa a Misa Rodríguez y Esther González ha hablado de cómo vivieron las jugadoras ese momento y de su opinión al respecto.

Rafaela Pimenta es una superagente quien cuenta entre su lista de cliente con jugadores de la talla de Erling Haaland, Paul Pogba, Matthijs Ligt o las dos futbolistas de La Roja. Todo un hito en el fútbol internacional, un mundo copado de hombres. La abogada brasileña, en una entrevista con The Guardian, ha hablado sobre el beso no consentido del expresidente de la Federación Española de Fútbol a Jenni Hermoso.

Te puede interesar: La federación australiana se convierte en un ejemplo de igualdad: selección masculina y femenina con el mismo salario y salas para bebés hasta 4 años

Estamos en una industria donde no hay igualdad. Mire lo que pasó con el Mundial femenino. ¿Qué demonios fue eso?”, cuestiona. A lo que añade: “¿Cómo puede alguien esperar salirse con la suya? ¿Cómo puede alguien apoyarlo? Tal vez una persona esté fuera de sí pero, si se toma en cuenta el tiempo que tardó en suceder algo, es porque todo el sistema no está unido para condenar eso”.

Respecto a cómo vivieron ese momento tanto Misa Rodríguez como Esther González, Pimenta ha explicado que habló como con ambas porque “era preocupante ver cómo se sentían. Fue muy triste ver lo duro que lucharon, lo lejos que llegaron, lo difícil que es ser mujer en el fútbol. Su logro se vio ensombrecido por el abuso”. La agente brasileña también ha relatado que durante esos días, gracias a habla muchos idiomas, leyó muchos comentarios en todo el mundo y se sorprendió al ver que había personas que pensaban: “Mira a esa chica, reacciona exageradamente. Fue solo un besito. Ello lo quería”.

Te puede interesar: Lo que ellas logran en las pistas no se refleja en los despachos: solo cuatro federaciones olímpicas en todo el mundo están lideradas por mujeres

Y considera: “Hay mucho por hacer, pero el fútbol es un arma. Es un arma para el cambio”. Sobre si estos cambios será visibles próximamente, Pimenta asegura: “Es una de las razones por las que estoy aquí. Si puedo inspirar a una niña a lucha por lo que quiere, mi trabajo estará hecho”.

El papel de la mujer en el mundo del fútbol

La superagente también habla del papel de la mujer el mundo del fútbol y asegura que en todo el tiempo que lleva trabajando en este deporte, varias décadas, solo se ha topado con otras dos mujeres en posiciones de poder. Por un lado, con Marina Granovskaia, exdirectora del Chelsea; y con Karren Brady, con quien coincidió una vez en el West Ham. Sin embargo, se muestra optimista: “Hace años, una mujer escribía un libro y usaba el nombre de un hombre, de lo contrario, no sería publicado. Muchas mujeres participaron en importantes inventos científicos y nunca se atribuyeron el mérito. Es realmente impactante. Pero también es impactante ver eso todavía hoy”.

Además, destaca que para hacerte oír como mujer “tienes que demostrar tu valía mucho más que los hombres, todo el tiempo”. ”Si te enojas, eres una perra. Si reaccionas, estás exagerando porque eres una mujer emocional. Si quieres ser un líder, eres demasiado ambicioso, frío y duro. Para un chico está bien ser así. Estamos en una industria donde no hay igualdad”, considera.

Guardar