‘Hellfire’, el “misil ninja” con cuchillas voladoras que el Gobierno adquirirá para armar al ‘Predator’, el mayor dron del Ejército del Aire

Defensa invertirá más de 13 millones de euros para equipar, por primera vez, con armamento letal a la flota de cuatro aviones no tripulados de este tipo

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Lanzamiento desde un dron Predator B (Reaper) de EEUU de un misil Hellfire (USAASC)
Lanzamiento desde un dron Predator B (Reaper) de EEUU de un misil Hellfire (USAASC)

Casi un año se ha tomado el Ministerio de Defensa para revelar el armamento con el que se equiparán a los mayores aviones no tripulados con los que cuenta el Ejército del Aire, los Predator B, después de que, el pasado febrero, la fuerza aérea española diera a conocer sus intenciones de armar finalmente los cuatro drones de este tipo que opera desde principios de 2021. El seleccionado es el AGM-114 Hellfire, poderoso misil aire-tierra de origen estadounidense, para cuya adquisición el Consejo de Ministro ha dado luz verde este martes a la celebración de un contrato por valor de 13.395.015 euros.

De acuerdo a lo explicado desde el Gobierno, esta compra “permitirá actualizar y potenciar las capacidades de este sistema de armas (Predator), mejorando con ello las capacidades aire-superficie del Ejército de Aire y del Espacio para el cumplimiento de las misiones que tiene encomendadas, especialmente en lo relativo al apoyo y protección de las distintas Unidades de las Fuerzas Armadas y de su personal en el curso de las operaciones”.

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De esta manera, la cartera de Margarita Robles ha optado por el arma fabricada por la empresa estadounidense Lockheed Martin en detrimento del misil Brimstone, producido por la francesa MBDA -firma con importante presencia en España-, que es el otro proyectil aire-tierra capaz de transportar el Predator B, aeronaves que en Estados Unidos se denominan Reaper. Con la compra del Hellfire, el Ejército del Aire inicia el proceso para incorporar al combate activo a estos drones, que hasta el momento son desplegados, desde el Ala 23 de Talavera la Real (Badajoz), solo en misiones de vigilancia y reconocimiento.

El “misil ninja”

El Hellfire es un misil esencial en el arsenal de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos, que lo han empleado en numerosas misiones, especialmente en aquellas llevadas a cabo para eliminar objetivos de relevancia. Sin embargo, las primeras versiones de este misil eran excesivamente destructivas y no tan precisas, lo que muchas veces suponía la destrucción de todo un edificio con la consecuente muerte de inocentes. Para resolver este problema de daños colaterales, que más de una vez le ha generado problemas a Washington desde el inicio de la guerra contra la Yihad islámica tras el atentado a las torres gemelas, se diseñó una nueva versión de este armamento: el Hellfire R9X, el conocido como “misil ninja”.

El R9X es capaz de desplegar, antes de impactar, seis cuchillas sumamente afiladas con las que atravesar distintas estructuras -como edificios o vehículos- y, gracias a una mayor precisión de guiado láser, impactar directamente en el blanco. Esta filosa versión ganó gran repercusión, en julio de 2021, cuando EEUU la utilizó, lanzada justamente desde un dron, para eliminar al sucesor de Osama Bin Laden al frente del grupo terrorista Al-Qaeda, Aymán az Zawahirí, quien fue alcanzado por un Hellfire que atravesó la ventana de su habitación en un hotel del centro de Kabul, la capital afgana. Desde el Ministerio de Defensa aún no han especificado qué versión -o versiones- se planea incorporar.

El Hellfire tiene una longitud de 163 centímetros y un diámetro de 17,8 cm. El misil, dependiendo la versión, puede pesar entre 45 y 49 kilogramos y alcanzar velocidades de 425 metros por segundo. Además, gracias a su sistema de guía, es capaz de impactar en objetivos a una distancia de entre 500 metros y ocho kilómetros.

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