La Fórmula 1 ya está en Las Vegas. O mejor dicho, Las Vegas ya está en la Fórmula 1. La Ciudad del Pecado, capital universal del entretenimiento y espectáculos, desembarca en el gran circo bajo un clima de insatisfacción entre los pilotos. Especialmente de Max Verstappen, ya coronado como tricampeón del mundo.
“En primer lugar, estamos aquí más para el espectáculo que para la carrera en sí”, sostiene Max Verstappen, quien no teme a la hora de mostrar su verdadera opinión al respecto y hablar directamente sobre los intereses de un campeonato deportivo en un proyecto como el del Gran Premio de Las Vegas. “En realidad no estoy muy interesado en eso, iré allí, haré lo mío y me iré. Depende de quién y para qué será interesante o no. En términos de espectáculo de carreras tal vez no, pero en términos de socios potenciales para la F1 y todo el espectáculo que la rodea puede ser. Pero repito, no me interesa”.
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La particularidad del trazado y las condiciones de la pista aún son una incógnita. “Todavía tengo que ir al simulador. Todavía ni siquiera conozco la pista, para ser honesto, la última vez que lo probé en el juego de F1, creo que choqué con más muros de las que iba en línea recta, así que, espero que no sea el caso cuando empiece a pilotar allí”, avanza el piloto neerlandés. “Va a ser muy diferente a Brasil; temperaturas muy bajas y, por supuesto, de noche. No tenemos experiencia allí. No conocemos el agarre de la pista, es todo nuevo, así que tal vez dé algunas sorpresas”, añade.
Preocupación con Alonso y Aston Martin
La Fórmula 1 clavará el próximo fin de semana su bandera en territorio inhóspito hasta la fecha: Las Vegas. Hasta la Ciudad del Pecado viajará el gran circo y un Fernando Alonso reencontrado con la mejor versión de su monoplaza tras su exhibición en Brasil donde volvió a ganar Verstappen con Norris segundo. Precisamente el piloto británico ha liderado la recuperación de Mclaren en la segunda mitad del campeonato. Los de Woking han pasado de habitar en la parte media de la parrilla a convertirse en habituales del podio.
Tan significativo ha sido el cambio que han conseguido revertir la parrilla y superar a Aston Martin en el campeonato de constructores. A ello también ha colaborado los malos resultados de la escudería británica. Tanto Alonso como Stroll sufrieron los problemas en el monoplaza y cayeron hasta la parte baja de la parrilla y, en ocasiones, llegaron a retirar el coche antes de ver la bandera a cuadros. Sin embargo, la mejoría vista en Brasil, con el asturiano en el podio y el canadiense en la quinta plaza, ha hecho saltar la liebre en Mclaren. “Tenemos que reconocer que Aston parece haber vuelto al lugar donde tenía que empezar la temporada”, advertía el jefe de equipo, Andrea Stella.
“Tenemos que considerarlos en el campeonato y debemos tener mucho cuidado de que puedan sumar muchos puntos en las últimas carreras”, añade. Dos carreras, Las Vegas y Yas Marina, y 88 puntos en juego para que se dirima un ganador de la batalla entre Aston Martin y Mclaren. Tanto en el campeonato de pilotos, donde Fernando solo supera por tres puntos a Norris, como en el de Constructores, en el que Mclaren aventaja a las flechas verdes por 21 unidades.