La Audiencia Nacional ha asumido la investigación del intento de asesinato del expresidente del PP de Cataluña y fundador de Vox, Alejo Vidal-Quadras, por posible terrorismo, según confirman fuentes jurídicas. En concreto, el magistrado titular del Juzgado Central de Instrucción número 1, Francisco de Jorge, dirigirá a partir de ahora las actuaciones sobre el disparo que pudo acabar con la vida del político en la calle Núñez de Balboa de Madrid el pasado jueves.
El juez considera que los hechos son competencia de la Audiencia Nacional al tratarse de un delito de tentativa de asesinato de naturaleza terrorista, según informa la Audiencia Nacional. Y es que la Policía Nacional dio credibilidad al testimonio del propio Vidal-Quadras, quien transmitió desde el hospital sus sospechas sobre la implicación del régimen iraní en el atentado. Desde ese momento, los agentes especialistas en Información se hicieron cargo de la investigación.
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Ahora, el magistrado De Jorge está a la espera de que el juzgado de instrucción de Madrid que inicialmente abrió una causa por el atentado tras recibir el atestado policial se pronuncie sobre la posible competencia de la Audiencia Nacional para dirigir las próximas actuaciones.
Fue el propio Vidal-Quadras quien manifestó a la Policía, a través de los sanitarios del hospital Gregorio Marañón y su entorno, que el régimen iraní de los ayatolás podía estar detrás del atentado perpetrado por dos posibles sicarios que aún no han sido detenidos. Así lo sospechó por su estrecha relación con la oposición del país de Oriente Medio desde su etapa como eurodiputado.
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El expresidente del PP de Cataluña fue intervenido quirúrgicamente por una doble fractura mandibular tras el disparo que le atravesó la boca desde el pómulo derecho al izquierdo. Continúa ingresado en el hospital y su estado, según el último parte médico, era estable y fuera de peligro.
Su relación con el régimen iraní
Maryam Rajavi, la líder del Consejo Nacional de Resistencia Iraní (CNRI), con el que se relaciona Vidal-Quadras desde hace años y financiador de la campaña electoral de Vox en 2014, señaló en un comunicado a través de X (antes Twitter) como “principal sospechoso” al “fascismo religioso en el poder en Irán, contra el cual el señor Vidal-Quadras dedicó una parte importante de su vida”.
Uno de los episodios más relevantes de la oposición del fundador de Vox al régimen iraní tuvo lugar tras las protestas por la muerte de la joven Masha Amini después de ser detenida por la llamada policía de la moral por llevar mal puesto el velo. El caso llegó a la Unión Europea, que impuso sanciones a Irán. Como respuesta a las acusaciones internacionales, los ayatolás crearon una lista de entidades y personas contrarias al régimen a las que también imponían sanciones. Ahí figuraba el nombre de Vidal-Quadras.