La escalada galopante de los tipos de interés que se ha producido desde que en julio del año pasado el Banco Central Europeo (BCE) decidiera subirlos hasta colocar el precio del dinero en el 4,5% tendrá su punto de inflexión en la segunda mitad del próximo año, en que podrían empezar a bajar, vaticinan los analistas de CaixaBank Research.
La entidad recoge en el editorial de su Informe Mensual de noviembre que los tipos podrían mantenerse en los niveles actuales hasta la segunda mitad de 2024 y, a partir de ahí, iniciarse un descenso, “aunque todavía con unas condiciones financieras claramente en zona restrictiva”.
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El mantenimiento de los intereses en el primer semestre se debe a que, aunque la inflación está cayendo en la zona euro hasta cerrar octubre en el 2,9%, aproximándose al objetivo del 2% al que quiere doblegarla el supervisor, hay que ser “cautos”, recomienda el informe, debido a la complejidad del escenario geopolítico y al riesgo de que algunos precios hayan adquirido una mayor inercia que en el pasado. No hay que olvidar que al conflicto entre Rusia y Ucrania se suma ahora el de Israel y Hamás en Gaza.
Los expertos de CaixaBank Research consideran que la evolución de la inflación está sujeta a una elevada incertidumbre que afecta tanto a los factores “que escapan al control de los bancos centrales”, como el precio del petróleo o la política fiscal, como a las dudas sobre la inercia de los componentes de la cesta de la compra, ya que los riesgos de efectos de segunda ronda aún se mantienen.
Una buena noticia para los hipotecados
La caída de tipos de interés supondrá un balón de oxígeno para los que están pagando una hipoteca a tipo variable que han visto cómo, mes a mes, se han incrementado sus cuotas. La primera buena noticia en este sentido se la dio el Banco Central Europeo cuando decidió, el pasado mes de octubre, frenar la subida de los tipos y, con ello, la escalada del euríbor, que cerró en octubre en el 4,16%.
No obstante, los beneficios de esta decisión no se verán a corto plazo, ya que el euríbor continúa por encima del 4%, por lo que “se pagarán hipotecas muy elevadas hasta que baje”, apunta Miquel Riera, experto en hipotecas de HelpMyCash.
Así, los que revisen su préstamo hipotecario en noviembre verán cómo sus cuotas vuelven a subir debido a que el euríbor hace seis meses -cuando la revisión sea semestral- estaba en el 3,757% y hace un año -cuando la revisión sea anual- estaba en el 2,629%, en ambos casos muy por debajo del valor con que el índice cerrará octubre, en torno al 4,17%.
La congelación de tipos tiene “un efecto de abaratamiento hipotético sobre los hipotecados”, indica Pedro Ruiz, portavoz de finanzas personales de Kelisto, ya que el euríbor “no ha escalado aún más en octubre debido a que se esperaba que el BCE no subiera los tipos. Si se hubiera previsto un nuevo incremento, es probable que el indicador hubiera subido más”.