Las rebajas en la factura de la luz más allá de 2023: Bruselas da el visto bueno a que se extiendan hasta marzo del próximo año

La guerra en curso de Rusia contra Ucrania y las tensiones geopolíticas en Oriente Medio, plantean importantes riesgos y siguen siendo una fuente de incertidumbre

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Pedro Sánchez y Úrsula Von
Pedro Sánchez y Úrsula Von der Leyen.

Pese a que hace unos meses la Comisión Europea daba por zanjada la crisis energética, el Ejecutivo comunitario ha propuesto a los diferentes Estados miembro una prórroga limitada de otros tres meses de las ayudas y subvenciones a la factura de la luz. En España, las medidas de alivio energético se extienden hasta el próximo 31 de diciembre y su continuidad se decidirá cuando se acerque esa fecha, según ha reconocido en varias ocasiones la ministra para la Transición Energética, Teresa Ribera.

Concretamente, Bruselas pone como fecha límite el próximo 31 de marzo de 2024, como línea roja para la continuidad de estos estímulos económicos. “Esto permitirá a los Estados miembros, cuando sea necesario, ampliar sus planes de apoyo y garantizar que las empresas aún afectadas por la crisis no se queden sin el apoyo necesario en el próximo período de calefacción invernal” aseguran desde la Comisión.

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Desde el comienzo de la guerra de Rusia contra Ucrania y en el contexto de sus efectos directos e indirectos en la economía de la Unión Europea, el Marco Temporal de Crisis de ayudas estatales, adoptado el 23 de marzo de 2022, ha permitido a los diferentes países proporcionar el apoyo específico a las empresas y familias que sufriesen una situación de vulnerabilidad.

Mientras continúa el conflicto, la situación económica europea está mostrando resiliencia frente a las conmociones que ha sufrido. Las previsiones económicas de verano de 2023 de la Comisión señalan que la economía de la UE sigue creciendo, aunque con un impulso reducido. La situación de los mercados energéticos y, en particular, los precios medios del gas y de la electricidad parecen haberse estabilizado.

Además, los riesgos de escasez de suministro de energía han disminuido, entre otras cosas, debido a las medidas adoptadas por los Estados miembros para diversificar las fuentes de energía. Al mismo tiempo, las previsiones económicas de verano de 2023 señalan que la guerra en curso de Rusia contra Ucrania y las tensiones geopolíticas más amplias, en particular en Oriente Medio, plantean importantes riesgos y siguen siendo una fuente de incertidumbre, lo que ha llevado a Bruselas a proponer esta prórroga.

La previsión de recaudación aleja las posibilidades de prórroga

Pese a que Teresa Ribera ha pospuesto esta decisión a final de año, lo cierto es que las cuentas remitidas a Bruselas ya adelantan la caducidad de las medidas para frenar el alza de la factura de la luz. La rebaja al 5% del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) de la electricidad y la reducción del 5,11% al 0,5% del Impuesto Especial sobre la Electricidad estarán vigentes hasta el próximo 31 de diciembre, aunque, tal y como recoge el Plan Presupuestario de 2024, parece que no continuarán más allá de esa fecha.

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Concretamente, la rebaja del IVA de la electricidad ha supuesto una merma en los ingresos de las arcas públicas de 514 millones de euros en 2023. Sin embargo, para 2024 el Ejecutivo en funciones planea recaudar 1.016 millones a través de este gravamen, como consecuencia del fin de esta medida. Desde que se produjese esta rebaja fiscal allá por 2021, el Gobierno ha ingresado 2.300 millones menos de IVA de la luz, lo que ha favorecido que las familias hagan frente a recibos eléctricos más baratos.

Por su parte, la rebaja tipo del 5,11% al 0,5% del Impuesto Especial sobre la Electricidad también volverá a generar ingresos positivos para el Estado durante el próximo año. Concretamente, el Gobierno prevé recaudar 1.032 millones a través de este gravamen en 2024. Desde que se redujo este impuesto en septiembre 2021, el impacto negativo para las arcas públicas asciende a 2.041 millones -sin contar con el año 2023-.

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