Björk sigue dando pistas sobre Oral, un tema que escribió hace 20 años y que ha rescatado de la mano de Sega Bodega y Rosalía, que colabora con la islandesa en una canción benéfica que recaudará fondos para luchar contra las nocivas prácticas de piscifactoría del país.
La dupla entre Björk y Rosalía venía fraguándose desde hacía varios años. La artista catalana no ha escondido nunca su predilección por la cantante islandesa, y la pujante fama de la primera la ha colocado en las playlists de una de las intérpretes contemporáneas más auténticas y vanguardistas. “La conozco desde hace unos años y decidí mandarle un mensaje para preguntarle si quería colaborar. Me contestó: ‘¡Sí, me apunto!’”, declaró la islandesa hace unas semanas en una entrevista con The Guardian. Así se consumó una esperada colaboración entre dos artistas que pueden, de formas diversas, ser gotas de un mismo vaso.
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Oral es una canción que Björk creó en el estudio hace 20 años. Tiempo después decidió rescatarla e incluir a Rosalía en el proyecto. “El ritmo era muy primitivo, pero supongo que estaba ligeramente inspirado en el dancehall de Jamaica”. Le sonó “extraña” y decidió llamar a la catalana para darle un toque más pop y contemporáneo. Con el fin de encontrar un público acérrimo a los sonidos similares a los de Bizcochito, Björk también ha contado con la ayuda del productor irlandés-escocés Sega Bodega.“Ahora es otro género llamado reggaetón y el último álbum de Rosalía estaba inspirado en el reggaetón, así que pensé en ella”, dice sobre la reedición del tema y la progresión del dancehall en la industria musical.
Pese a que, en primera instancia, muchos creyeron que el tema iría sobre la causa benéfica, la islandesa ha confirmado que la canción no ahonda en las cuestionables prácticas pesqueras de su país. “Es una canción de amor, no va sobre los peces”, aunque, afirma, “se podría escribir una buena canción punk sobre eso”. La expectación es máxima porque, no solamente supone el regreso de Rosalía a la música después del fin del Motomami World Tour y de su sonada ruptura con Rauw Alejandro, sino que además será de la mano de una de las artistas que ha admirado y que la inspiran.
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Fanatismo total
La admiración entre Rosalía y Björk es palpable. La primera, que acudió a la fiesta de Halloween de Kendall Jenner en Los Ángeles, decidió vestirse como Björk para la ocasión, portando el icónico vestido de cisne que la islandesa llevó a los Premios Oscar y que se ha convertido en uno de los diseños más recordados de la hemeroteca. El guiño a la artista islandesa no es gratuito, porque conociendo a la catalana, seguramente forme parte de la promoción de Oral.
Por su lado, la artista de Venus as a Boy sigue alabando a la artista de Motomami en las entrevistas que está concediendo en las últimas semanas. En una conversación con Rolling Stone, Björk ha hablado de Los Ángeles, el primer disco de Rosalía y el más enfocado en los sonidos flamencos que siempre han inspirado a la catalana.
“Escuché su primer disco, en el que cantaba flamenco, hace unos cinco años”, alega sobre Los Ángeles. “Me encantó. Me obsesioné con él y lo escuchaba sin parar. Contacté con ella a través de Pablo [Díaz-Reixa], se llama El Guincho, y trabaja con ella. De hecho vino a Brooklyn a ayudarme con los ritmos en dos de mis discos de Biophilia, allá por 2010″, continúa la islandesa. “Así que, la siguiente vez que vine a Barcelona, me reuní con ellos y con Alejandra [Rodríguez], ya sabes, Arca. Ahora vive en Barcelona. Así que estuvimos pasando el rato los cuatro, fue bastante bonito. Creo que hablamos de grabar algo, pero que tenía que ser en el momento adecuado y con la canción adecuada”, indica a la revista.
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Tras el éxito de Motomami, Rosalía se convirtió en uno de los objetivos de la prensa extranjera, que comenzó a descubrir el torbellino musical de la catalana: su voz, su particular visión y su espectáculo. Desde entonces, el mercado anglosajón se postula como la diana de la nueva etapa musical de la intérprete. Una noticia que confirma lo anterior es el fichaje de Jamie Levine, representante que trabajó con Shakira durante 10 años y que será la nueva manager de la artista tras finalizar su relación laboral con Rebeca León (con quien había trabajado durante cinco años).
En Vogue España, la intérprete también confirmó que estará presente en la próxima gala de los Latin Grammy, que se celebrará en Sevilla el próximo 16 de noviembre. No sabemos si actuará, pero lo que sí que ha confirmado es que dará el relevo al ganador de ‘Álbum del Año’, un premio que presentará y que ella misma ganó con Motomami en la gala de 2022. Despechá, la canción que se convirtió en la banda sonora estival de 2022, es la única opción de galardón para Rosalía este año, nominada en la categoría de ‘Grabación del Año’.