Expresos políticos de Venezuela se reúnen en Madrid para denunciar las torturas: “Nos trataban como muñecos de boxeo”

La plataforma ‘Voces de la Memoria’ ha organizado una concentración para mostrar las condiciones en las que malviven más de 330 presos a través de una experiencia inmersiva

Guardar
Medio centenar de personas se
Medio centenar de personas se concentran en Madrid para pedir el cese de las torturas en Venezuela.

Venezuela, 2023. Una celda de 30 metros cuadrados para una docena de personas. Silencios largos, salvo cuando estallan los gritos. La noción del tiempo no existe, porque los presos no tienen luz. Los alimentos están en mal estado y el agua no es potable. Estas son las condiciones en las que malviven los más de 330 presos políticos que permanecen encerrados en El Helicoide, un antiguo centro comercial que se ha convertido en el centro de torturas más grande de América Latina. Los reclusos, entre los que figuran bailarinas, estudiantes, activistas y diputados, han sido arrestados por secundar las protestas contra el régimen de Nicolás Maduro.

La plataforma Voces de la Memoria ha organizado este miércoles una marcha en el centro de Madrid para pedir la liberación de los opositores cautivos y destapar los entresijos de El Helicoide. Un grupo de expresos ha reconstruido, mediante sus testimonios, las instalaciones del centro de torturas. ¿El resultado? Una experiencia inmersiva que los madrileños han podido vivir en primera persona en la plaza de Callao. Los miembros de la asociación han salido a la calle con unas gafas de realidad virtual y unos cascos para enseñarle al mundo cómo son los calabozos en los que cumplen condena los presidiarios.

Te puede interesar: Víctor Navarro, expreso político de ‘El Helicoide’, centro de torturas en Venezuela: “Estar ahí es ir perdiendo poco a poco la vida y de alguna manera la razón de ser”

“La gente se está quedando impresionada, casi nadie se imaginaba el nivel de atrocidad que puede haber en estos lugares”, explica Víctor Navarro, expreso político y miembro de la plataforma. El exdiputado fue detenido de forma “arbitraria” por las autoridades venezolanas y ha estado cinco meses cumpliendo condena en el centro de torturas y castigos. Hace un tiempo, pudo salir como refugiado y emprender una nueva vida en Argentina. “La realidad virtual te muestra cómo la cadena de mando de Nicolás Maduro nos tortura de forma sistemática. Hemos estado encerrados en El Helicoide y sabemos lo que es. Hemos recreado los espacios para redimensionar, a través de esta tecnología, cómo vive un preso político en Venezuela”, continúa.

El acto ha reunido a medio centenar de personas en las calles de la capital española. Los manifestantes han pedido el cierre de los centros de tortura y el fin de las descargas eléctricas. “Lo mejor es que cada vez son más las personas que empatizan con esta situación”, apunta otro de los asistentes. “Tenemos una deuda pendiente con los presos políticos, con los que han sobrevivido a la celda de la dictadura. No vamos a parar hasta que se haga justicia”, ha defendido Rodrigo Diamante, activista y antiguo recluso de la citada prisión.

Un hombre con las gafas
Un hombre con las gafas virtuales que recorren El Helicoide por dentro.

“Mi captura se produjo cuando tenía 16 años”

La asociación Voces de la Memoria ha leído un manifiesto en defensa de los más de 330 presos políticos que aún cumplen condena en El Helicoide. Los participantes han puesto el foco en la “libertad” de los reclusos y de sus familias. Dylan Canache ha sido uno de los expresos políticos que ha intervenido en el acto. El joven fue detenido cuando todavía era menor de edad y ha vivido un “auténtico infierno” el centro de torturas. “Mi captura se produjo en 2018. Eran las 3.00 de madrugada. He sido golpeado, encerrado en una celda sin luz, ni agua potable. La habitación tenía capacidad para cuatro personas, pero dormíamos 16, todos hacinados”, relata el adolescente en una conversación con Infobae España.

Tenía 16 años, no pude continuar con mis estudios. La tortura psicológica es inimaginable, no puedo ni siquiera expresar lo que he vivido porque no lo he digerido del todo. Ha sido una experiencia desgarradora, todavía cargo con las secuelas”, continúa Dylan Canache. El joven no solo ha conocido la crueldad de El Helicoide, sino que también ha pasado por Cochecito, un centro de menores que también se encuentra en Caracas. “Los abusos y las torturas fueron a más. Nos utilizaban como muñecos de boxeo”, prosigue el expreso, que no ha podido recibir noticias de sus padres en casi seis meses de detención. “Lo que hemos vivido es aterrador, la lucha continúa, por eso estamos aquí. Esto es una prueba de que seguimos en pie. No nos vamos a callar hasta que todos los presos políticos sean liberados”, termina.

Guardar