Si por algo es conocida Padre de familia, es porque nunca se calla nada. La serie creada por Seth MacFarlane ha sido considerada siempre como la hermana deslenguada de Los Simpson, una serie de animación sobre una familia media americana pero mucho más disfuncional y ordinaria que la de Springfield. Es por ello que en ella hemos podido ver todo tipo de parodias, chistes de humor negro y demás elementos ofensivos, bromas que no siempre han caído bien en sus víctimas y que ahora han ampliado el círculo hasta la Casa Real Británica. Porque el último dardo ha ido a parar nada menos que a los Duques de Sussex, Harry y Meghan.
Ha sido en el último capítulo de Padre de familia, que acostumbra a poner de ejemplos de lo más variopintos cada vez que su protagonista, Peter Griffin, tiene que hacer una comparación. Las metáforas de Peter han dado para grandes gags, pero hasta ahora ninguno había sido tan director y explícito como este hacia el que fuera príncipe de Inglaterra y su mujer Meghan Markle, otrora estrella de televisión gracias a la serie Suits. Ambos ya habían sido protagonistas en la serie documental que lanzó Netflix el año pasado, pero ahora se han convertido en personajes de animación. Y en la parodia en cuestión se menciona precisamente su millonario contrato con la plataforma.
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En la secuencia se puede ver a Harry y Meghan sentados en una tumbona junto a su piscina, a la que se acerca su mayordomo con un sobre que contiene “los millones de Netflix por nadie-sabe-bien-qué”, a lo que Harry responde que los ponga “junto al resto”. Entonces la conversación se ve interrumpida por Meghan, que estaba sentada al lado mirando el móvil, quien insta a su marido a que realicen “el post de publicidad diario valorado en 250.000 dólares”, a lo que esta versión animada del duque de Sussex responde desganado: “No debería haber dejado las tonterías inventadas”.
Su presencia en redes
Detrás de esta broma tan directa por parte de Padre de familia puede haber dos razones. La primera, y más evidente, la reciente colaboración de Netflix con los propios duques de Sussex a través de Harry & Meghan, la docuserie en seis episodios que fue estrenada a finales del año pasado y en el que conocíamos el lado más íntimo de la pareja, o al menos la parte que decidían mostrar. Por otro, aunque no tan claro, es el hecho de que tanto Harry como Meghan estén tan sobreexpuestos sin ni siquiera tener redes sociales. Ambos iniciaron en 2020 un movimiento por dejar atrás la Casa Real y ello pasó por retirar su cuenta de Instagram, mientras se mudaban a vivir al hogar de Markle en California.
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No es la primera vez que una serie de animación se burla de esta manera de Harry y Meghan, aunque sí la que lo hace de manera más directa. Anteriormente, ya se podía haber visto una parodia de ellos en otra serie de animación para adultos como es South Park, en la que en un episodio se podía ver a una pareja con claro parecido a la de los duques de Sussex portando unos carteles que pedían intimidad, al tiempo que satirizaban esta pedida de intimidad compaginada con el estreno de la docuserie.