Tras cuatro años de retraso, el Gobierno foral aprobó este miércoles el reglamento de jornadas, horarios y retribuciones de su policía autonómica, con una mejora retributiva que suma 23,2 millones de euros.
Este aumento se reflejará en una nómina de 21.000 euros de media en el mes de noviembre para los 1.100 policías de Navarra, pues se aplican a efecto retroactivo desde enero de 2019. El pago incluye la subida del 0,5% de sueldo otorgada a los empleados públicos.
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Se trata de una subida pendiente desde el año 2018, con la aprobación de la nueva Ley de Policías, que reconocía un incremento salarial para el cuerpo. La normativa daba plazo de un año desde su entrada en vigor para que el Ejecutivo navarro aprobara este reglamento que regula, entre otros aspectos, las retribuciones complementarias de la Policía Foral según el empleo, puesto o funciones de los agentes. Se tienen en cuenta otras retribuciones como las indemnizaciones por viajes o las compensaciones por hora extra.
La consejera de Interior, Función Pública y Justicia, Amparo López, quiso destacar que este nuevo reglamento “reconoce la naturaleza singular y exigencia de la labor policial” y supone un “mejor servicio de protección y seguridad a la ciudadanía”.
Un incremento de 200 euros al mes
Los sindicatos calculan que la subida será, de media, de unos 200 euros mensuales por agente, lo que supondrá un coste de 7,4 millones de euros anuales. Esto no aplicará por igual a todos los agentes, sino que el aumento se calculará de manera individualizada a partir del informe de valoración de puestos de trabajos elaborado en 2019.
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En él, se diferencian seis puestos distintos dentro de la Policía Foral: policía, cabo, subinspector, inspector, comisario y comisario principal. Se tiene también en cuenta la preparación técnica, el grado de dificultad de las tareas, el horario, la penosidad, nocturnidad o el riesgo y la dedicación de cada uno de los puestos.
Mejoras horarias para los agentes
El nuevo reglamento establece también un nuevo sistema para cubrir servicios que promete una “organización más eficiente”, según el Gobierno. Así, se implementará una bolsa de horas que permitirá una distribución de las horas extra “desde la voluntariedad de los agentes” para garantizar que el servicio se presta las 24 horas del día durante todo el año.
Según afirman desde Comisiones Obreras, este sistema supone un “importante incremento retributivo respecto de las horas extraordinarias” para los agentes. El reglamento incluye también la figura de los llamamientos, con el objetivo de asegurar “la prestación continuada de un servicio que, por su naturaleza, no cuenta con listas de contratación como en el resto de ámbitos de la Administración”; señala el Ejecutivo navarro.
Respecto a los horarios, se diferencian tres tipos según las funciones de las unidades policiales: el horario general, horario flexible y horario de cómputo en días. Además, las guardias localizadas, hasta ahora compensadas con tiempo, pasarán a estar remuneradas.
La nueva norma incorpora como festivos a efectos retributivos las tardes de los sábados, así como las del 24 y 31 de diciembre, y 5 de enero. Reduce también de 29 a 26 los fines de semana por calendario.