El Parador a una hora de Madrid conocido como el ‘Versalles español’

¿Te imaginas dormir en un palacio? A día de hoy es tarea complicada, pero no hace no tanto, sobre los siglos XVII y XVIII, la alta sociedad habitaba estas construcciones imponentes y llenas de decorados. Uno de los palacios más simbólicos de Europa y del mundo es el Palacio de Versalles, un espectacular edificio cuya construcción se inició en el año 1623 por petición de Luis XIII. Posteriormente, su hijo, Luis XIV, más conocido como el ‘Rey Sol’, fue quien amplió el palacio, dando lugar al edificio que conocemos hoy en día.

Aunque Versalles es un espacio inigualable gracias a su impresionante estilo barroco francés y grandes dimensiones, España cuenta con un edificio que se puede considerar el hermano pequeño de esta obra monumental. De hecho, se le conoce popularmente como el Versalles español. Este es el caso de la Casa de los Infantes, un imponente edificio ubicado en la localidad segoviana de La Granja de San Ildefonso.

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Fue mandado construir por el rey Carlos III en el siglo XVIII para sus hijos, los infantes Gabriel y Antonio, de ahí el nombre. Pero si por algo destaca en el panorama nacional, es por ser, además, uno de los alojamientos más singulares del país, pues pertenece a la Red de Paradores de España. Por si fuera poco, se sitúa alrededor de una hora de Madrid, lo que le convierte en un espacio ideal para una escapada cerca de la capital.

El edificio se proyectó para alojar a los infantes Gabriel y Antonio, los cuales contaban con su propia servidumbre, cuyas familias eran un gran problema para los Reales Sitios debido a la falta de espacio. Además, el rey Carlos III “mandó publicar una orden por la que deberían ser Sus Altezas Reales, los infantes D. Gabriel y D. Antonio, los que se hicieran cargo del alojamiento de dichas familias en los Reales Sitios, edificando, comprando o alquilando casas para ello”, cuentan desde su página web.

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Así, se levantó la Casa de los Infantes, un espectacular edificio que presenta un estilo propio de los grandes palacios barrocos clasicistas. Cuenta con tres patios interiores en cuatro alturas, visibles a través de galerías de arcos de medio punto. Asimismo, próximo a la Casa de los Infantes se encuentra el antiguo Cuartel de la Guardia de Corps, el cual acoge a día de hoy el moderno Centro de Congresos y Convenciones. Se trata de un espacio que dispone de 16 salas de reuniones con capacidad para más de 600 personas.

Por su parte, el Sitio de La Granja de San Ildefonso fue el palacio favorito de Felipe V. Declarado conjunto Histórico Monumental, el Palacio Real alberga una hermosa decoración interior, donde destacan estancias como el Museo de Tapices, la Sala de Mármoles y los majestuosos jardines de forma francesa. La Real Fábrica de Cristales de La Granja es otro punto imprescindible de la visita.

En cuanto al Parador, este combina a la perfección la modernidad con los trazados propios del barroco. Cuenta con todo tipo de servicios y comodidades listas para el disfrute de los huéspedes. De todas ellas destacan el gimnasio, la piscina de temporada y los bellos jardines. A su vez, de la mano del Restaurante Puerta de la Reina del Parador de La Granja se puede degustar una maravillosa cocina regional sevillana.

El espacio “está especializado en la genuina cocina segoviana, en la que como heredera de los fogones castellanos de la cocina destacan los guisos y los asados de carne. La carta ofrece una cocina tradicional y auténtica, pero con matices de renovación”, explican desde el Parador.

Entre sus especialidades se pueden degustar platos típicos como “los judiones de La Granja, cochinillo MG asado con patatas y ensalada alineada, ración de cordero lechal IGP confitado, patatas encebolladas y ensalada, ponche segoviano (con mazapán y yema blanda)”. Por si fuera poco, el Parador cuenta con un magnífico spa donde poder relajarse en sus modernas instalaciones. Desde su página web recomiendan combinar el circuito de spa con uno de nuestros tratamientos para aprovechar la experiencia.

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El emplazamiento de la Casa de los Infantes es perfecto para conocer el entorno que le rodea. Así, es la oportunidad ideal para descubrir todos los rincones del Real Sitio de La Granja de San Ildefonso, declarado conjunto Histórico Monumental. Junto al Palacio Real de La Granja se encuentran la Real Fábrica de Cristales y la iglesia barroca de Nuestra Señora de los Dolores, las cuales son paradas imprescindibles.

Los amantes de la naturaleza no se pueden perder los paisajes que brinda el Pinar de Valsaín, con multitud de rutas de senderismo. La ciudad de Segovia, a tan solo 10 kilómetros, pone el toque cultural e histórico a este increíble destino gracias a impresionantes monumentos como el Acueducto romano, el espléndido Alcázar y las impresionantes iglesias románicas y monasterios.

Desde Madrid, el viaje hasta el Parador es de alrededor de 1 hora y 15 minutos por la carretera A-6 (hay peajes). Por su parte, desde Pedraza el trayecto tiene una duración aproximada de 40 minutos por las vías SG-P-2322, Carr. Soria - Plasencia/ N-110 y SG-P-6121.