La selección femenina de Jamaica sigue el ejemplo de la española y renuncia a vestir la camiseta por el maltrato de su Federación

La selección española femenina ha abierto la veda a decir basta, a no conformarse, a plantarle los pies al maltrato, al luchar por sus derechos y condicionales laborales. Las jugadoras de España han marcado un antes y un después al renunciar a vestir la camiseta hasta que no se produjeran cambios y ahora otras han seguido su ejemplo. Este es el caso de la selección femenina de Jamaica, quienes han renunciado a acudir a la concentración para los primeros Clasificatorios de la Copa de Oro Femenina, donde deben enfrentarse a Panamá y Guatemala. ¿El motivo? El “constante maltrato” que han recibido las jugadoras por parte de la Federación de Fútbol de Jamaica, según han explicado a través de un comunicado.

“Es con gran decepción que compartimos que la lista de la Copa Mundial 2023 no participará en la próxima ventana internacional de octubre para los primeros Clasificatorios de la Copa Oro Femenina”, comienza el documentos que ha difundido el equipo jamaicano. Las futbolistas ha asegurado que no ha sido una de las decisiones más difíciles que han tenido que tomar, aunque explican: “Creemos que es necesario adoptar una postura tan drástica para poner fin al constante maltrato que recibimos de la Federación de Fútbol de Jamaica”.

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A lo que añaden: “Como siempre, es un honor y un privilegio representar a Jamaica. Nuestro trabajo consiste en dar lo mejor de nosotros mismos y esforzarnos al máximo para representar a nuestro país y enorgullecer a nuestros seguidores, a nuestros seres queridos y a la diáspora. Debido a las actuales circunstancias en las que nos ha puesto la Federación de Fútbol de Jamaica, no podíamos hacer nuestro trabajo”. Además, han detallado que todavía no han recibido los pagos íntegros y por su participación en el Mundial, donde hicieron historia al pasar por primera vez a octavos de final, así como “las numerosas primas pendientes por la clasificación en el verano de 2022″.

También han expresado que han “tenido que lidiar una y otra vez con la falta de comunicación, la mala organización, la mala gestión y los retrasos en los pagos por parte de la JFF” Por este motivo, han decidido tomar la decisión de no acudir a la convocatoria de la selección hasta que la situación cambie la situación, quienes aseguran tener “esperanza” en que se ponga fin a este “ciclo de maltrato”.

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El problema es que la Federación de Jamaica lejos de tratar de llegar a un punto de entendimiento con la selección ha optado por realizar una convocatoria sin las jugadoras que acudieron al Mundial, que son las que han firmado el comunicado. No hay una sola jugadora de las que disputaron la Copa del Mundo, que haya sido llamada para disputar los encuentros frente a Panamá y Guatemala. No se conoce si después de esta concentración conseguirán llegar a un punto de entendimiento, como si consiguieron las jugadoras españolas.

Tras el caso Rubiales, las jugadoras de la selección española dijeron basta, reclamaron cambios estructurales dentro de la Federación. Sin embargo, conseguir un acuerdo entre el equipo y la RFEF era una tarea complicada que se fue convirtiendo en misión imposible a medida que pasaban los días y estaban cada vez más lejos de llegar a un punto de entendimiento. Entonces las futbolistas emitieron un comunicado renunciando a vestir La Roja hasta que hubiera cambias (como han hecho ahora las jugadoras de Jamaica). La RFEF aún así decidió convocarlas. Esto las puso entre la espada y la pared, dado que si no acudían a la llamada podrían ser sancionadas.

Es decir, fueron obligadas a ir a la concentración. Y, entonces, llegó la ya famosa cumbre de Oliva, donde llegaron a un acuerdo con la Federación: desarrollo de la Ley del Deporte en lo que respecta a las políticas de igualdad, en igualdad salarial y calidad de infraestructuras. A partir de ese momento, lo ánimos se calmaron. El problema es que la selección de Jamaica no ha tenido su cumbre de Oliva, al menos, de momento.