“Deberíamos volver atrás y repetir el día completamente, empezando por la mañana. Ha sido sesión terrible. Lance no completó ninguna vuelta. Hice solo seis o siete vueltas de calidad con el nuevo paquete. Hemos tenido incógnitas con el nuevo paquete, así que hemos ido a ciegas a clasificación… Por lo que, estos son los resultados”. Con estas palabras resumió Fernando Alonso su peor sesión clasificatoria de la temporada. El asturiano, único piloto de la parrilla que había conseguido entrar en todas las Q3 de la temporada, vio finalizada su peculiar condición al no poder superar el primer corte.
Parecía que la racha no iba a llegar a su fin. Más aún después de haber introducido un paquete de mejoras en el suelo, difusor, pontones y beam wing. Sin embargo, lo que debía ser un paso hacia adelante, ha confirmado la caída libre de Aston Martin. Fernando Alonso saldrá 17º en la parrilla del domingo. Las sensaciones ya fueron preocupantes desde la única sesión de entrenamientos Libres, pero nadie imaginaba que lo peor aún estaba por llegar. Lance Stroll y Fernando Alonso salieron con duros a la pista y prácticamente nada más salir volvieron al garaje. Volvieron con un aviso para el canadiense. En él le decían que no tocase prácticamente el freno a la hora de detener el coche en boxes.
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Fuego en el Aston Martin
Alonso, mientras daba sus primeras vueltas en Austin, vio como empezaba a salir fuego de su neumático delantero izquierdo. Fuego en su rueda. Fuego en sus frenos. En el lado izquierdo, al igual que en el coche de Lance Stroll. El canadiense, mucho trabajo en su coche; en el asturiano, de regreso a falta de menos de media hora para el final de la única sesión de Libres. Un lastre demasiado grande para dos pilotos que aspiraban a probar todas las nuevas mejoras, pero se plantaron en la sesión clasificatoria sin información sobre el rendimiento del AMR23.
SALE FUEGO 😳 🔥
— DAZN España (@DAZN_ES) October 20, 2023
El BRUTAL sobrecalentamiento del freno delantero izquierdo de Fernando Alonso nada más salir a pista #USADAZNF1 🇺🇸 pic.twitter.com/MBR2gYYZNX
“La carrera está muy comprometida ahora mismo. Utilizamos estos fines de semana como una prueba para el año que viene, incluso siendo doloroso. Así que vamos a ver lo que podemos aprender en las sesiones restantes. Todo estuvo mal gestionado. Crucé a un segundo del límite de quedarme fuera, con mucho tráfico por delante, dificultando poder hacer un buen crono…”, sentenció Alonso.
Sainz, realidad contraria
La otra cara de la moneda la vivió Carlos Sainz. Ha dado un golpe encima de la mesa para reafirmarse como primer espada de Ferrari, o al menos no el segundo. En apenas dos meses y medio, ha pasado de recibir por radio órdenes de equipo con el fin de dejar pasar a Leclerc, a celebrar a ritmo de Smooth Operator su segunda victoria con la escudería italiana y ser el único piloto capaz de poner fin a la hegemonía de victorias de Red Bull esta temporada. Su nuevo estatus en el box de Ferrari se lo han dado sus resultados carrera a carrera y sprint a sprint.
El formato, que cuando se instauró en 2021 sembró dudas a Sainz, –”pienso que la Fórmula 1 debería ser fiel a su historia”-, se ha convertido en el escenario donde ha destacado como el segundo mejor piloto de toda la parrilla, con 18 puntos acumulados en las cuatro carreras al sprint (Bakú, Spielberg, Spa y Losail) disputadas hasta la fecha. Tan solo es superado por Max Verstappen y sus 29 unidades, las últimas siete de ellas históricas, pues le permitieron coronarse como tricampeón del mundo y ser el primero de la historia en hacerlo en una carrera al sprint. Este fin de semana en Austin los dos españoles afrontan realidades opuestas. Sainz parte desde la cuarta posición y aspira a subir al podio, mientras que Alonso lo hace desde la decimoséptima plaza y tratará de minimizar daños.