Oviedo: la ciudad de los Premios Princesa de Asturias que sorprende con su impresionante casco histórico

Allá por el siglo XIV, en España tan solo existían los reinos de Castilla, Aragón y Navarra, dejando atrás ya el primigenio reino de Asturias, pero ¿por qué siete siglos después se sigue denominando Principado de Asturias? Su origen se remonta al año 1388, cuando, el rey Juan I de Castilla los creó a semejanza del de Gales tras una disputa con Alfonso Enriquez, hijo bastardo de Enrique de Trastámara. A día de hoy es la denominación oficial de la comunidad y mantiene una estrecha relación de hecho casa real.

De hecho, hoy tiene lugar la edición número 42 de los Premios Princesa de Asturias, unos galardones que reconocen la trayectoria de grandes personalidades de diferentes artes. Así, la actriz Meryl Streep, el deportista Eliud Kipchoge o el escritor Haruki Murakami son algunos de los galardonados en este 2023.

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Para ello, Oviedo se viste de gala en un día muy especial para toda la familia real, pues es la ciudad natal de la reina Letizia y son los últimos premios a los que acude la princesa Leonor antes de su mayoría de edad. Así, es un buen momento para visitar la ciudad y disfrutar de uno de los destinos más importantes de Asturias. Un paseo por su casco histórico permite conocer sus principales atractivos como son la impresionante catedral y el hermoso teatro Campoamor, el hogar de estos valiosos premios.

En la visita a esta ciudad, un recorrido por la calle Uría es algo imprescindible. Gracias a su ambiente comercial y bella arquitectura es uno de los espacios más emblemáticos de Oviedo. Su plan se realizó a finales del siglo XIX para enlazar la estación de ferrocarril con el centro urbano. Este último es una de las joyas de la localidad, pues sus callejuelas empedradas invitan a perderse.

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Estas desembocan es espacios tan singulares como la catedral, cuya imponente torre gótica preside la plaza de Alfonso II el Casto, quizá la más famosa de la ciudad, y uno de los puntos de encuentro en el paseo por el casco histórico. Además, constituye un punto habitual de paso del Camino de Santiago, siendo una referencia universal y primigenia de la peregrinación. A su vez, alberga una gran importancia histórica protagonizada por la Cámara Santa.

Es Patrimonio de la Humanidad y aún conserva la esencia de capilla palatina, tal como la concibió el propio Alfonso II, y que hoy alberga las reliquias y joyas de la antigua monarquía asturiana, pionera de la cristiandad occidental europea. Igualmente, la torre de la catedral forma lo que se conoce como el conjunto de las cinco torres de la “regia sedes”, tal y como explican desde el portal de turismo de Asturias. “Cinco torres en un breve recorrido circular que le confieren a la ciudad un aire histórico, medieval, renacentista y dieciochesco; un aire ecléctico y único en Europa”.

Así, los monumentos que conforman este pintoresco recorrido son: la torre de Santa María La Real de la Corte, colindante al convento de Las Pelayas; la torre románica de la catedral, así como su torre gótica, y la torre de San Tirso el Real, Iglesia fundada por Alfonso II el Casto.

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Acompañando a su bello casco antiguo, el teatro Campoamor emerge como el eterno epicentro cultural de la ciudad, acogiendo en su seno todo tipo de espectáculos al más alto nivel. De hecho, en él tiene lugar cada año la ceremonia de entrega de los Premios Princesa de Asturias, un galardón que se otorga desde 1981. A su vez, acoge un festival de ópera que trae y atrae a las grandes figuras líricas del panorama internacional.

Por otro lado, el Campo de San Francisco es el pulmón verde de la ciudad. Se trata de un espacio perfecto para relajarse y disfrutar de un hermoso día con la familia, siendo, además, uno de los parques más clásicos y conocidos de España. Pues tuvo su origen en un monasterio franciscano, siendo este campo el huerto del convento.

Tampoco podían faltar los museos, los cuales conforman una importante oferta cultural. Uno de los más destacados es el Museo Arqueológico, ubicado en una de las partes que componían el ya histórico convento de San Vicente. El viajero puede disfrutar de un extenso y detallado recorrido por la memoria prehistórica e histórica del devenir de Asturias y su evolución. Asimismo, el museo de Bellas Artes es el otro gran complejo que alberga.

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Se enclava en pleno casco antiguo y una parte de su fachada se asoma a la plaza de la catedral. Conforma una “mezcla de arquitectura clásica y contemporánea, en un marco de pensado diseño para considerables obras del arte español, en una visita que resulta profundamente amena y sorpresiva”, explican desde la web de turismo.

Desde Gijón, el viaje hasta Oviedo es de alrededor de 30 minutos por las carreteras A-8 y A-66. Por su parte, desde Santander el trayecto tiene una duración estimada de 1 hora y 55 minutos por la vía A-8.