La trayectoria de Mateu Lahoz, candidato a sustituir a Rubiales al frente de la RFEF: más de 30 años con el silbato en la boca y récord de tarjetas en un Mundial

A Mateu Lahoz se le está poniendo cara de presidente de la RFEF, o, al menos, eso es lo que suena en las esferas de la institución. El exárbitro español es una de las personas a las que muchos señalan como posible candidato a sustituir a Luis Rubiales como presidente de la Federación, después de que este presentara su dimisión por el beso no consentido a Jenni Hermoso. Lo cierto es que el nombre de este profesional, con más de 30 años de trayectoria con el silbato en la boca dirigiendo partidos, cada vez suena con más fuerza.

El pasado 10 de septiembre se hacía oficial: Luis Rubiales presentaba su dimisión al frente de la RFEF. 21 días tuvieron que pasar desde que se produjo el beso no consentido que le puso centro del huracán, y 15 desde la Asamblea extraordinaria en la que trató de atrincherarse al cargo. Finalmente, todo acabó por saltar por los aires y Rubiales se vio obligado a certificar su caída. En ese momento, fue Pedro Rocha, quien asumió el puesto de presidente en funciones, a quien muchos señalaban como posible sustituto oficial. Sin embargo, a medida que han ido pasando las semanas, su candidatura ha ido perdiendo fuerza y otros nombres han aparecido con mucha más, como el de Mateu Lahoz.

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Mateu Lahoz nació en Algimia de Alfara, en Valencia. Comenzó su carrera en 1992, dirigiendo partidos en las categorías inferiores del fútbol español. Tras ello, dio el salto a Tercera División en el 1999, donde se puso al frente de 31 partidos. Su actuación le sirvió para ir un paso más allá y comenzar una nueva etapa en la división de plata. Cuatro años y 86 partidos después, en los que demostró su valía como colegiado, el Comité de Árbitros decidió que era hora de ascenderle. En el año 2008, accedió a Primera División, donde ha permanecido durante 15 años, en los que ha dirigido 288 partidos, lo que le convierte en el tercer árbitro con más encuentros a sus espaldas, tan solo por detrás de Undiano Mallenco e Iturralde González.

Sin embargo, su carrera no solo discurrió en territorio nacional, sino que traspasó fronteras. En el año 2011 se convirtió en árbitro internacional: con dos Mundiales (Rusia 2018 y Qatar 2022), la Eurocopa 2020 y los Juegos Olímpicos de Río 2016. Aunque uno de los momentos más importantes de toda su carrera fue arbitrar la final de la Champions de 2021, que enfrentó al Chelsea y al Manchester City, con victoria por 1-0 de los Blues.

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Lahoz decidió colgar el silbato tras concluir la temporada 2022/2023. En concreto, fue el pasado 4 de junio en el encuentro entre el Mallorca y el Rayo, donde el colegiado puso fin a su carrera a los 46 años. Un pasillo de homenaje de los jugadores del encuentro, la ovación de todo Son Moix y sus familiares en el terreno de juego, fue lo que vivió el colegiado, que no pudo evitar las lágrimas. Sin embargo, la UEFA le regaló un último encuentro (Francia-Grecia) como agradecimiento a su trayectoria internacional.

El exábitro de español es conocido en el césped por ser conversador y explicar a los jugadores todas y cada una de las decisiones que toma sobre el terreno de juego, así como fuera de él. A quien, además, le gusta llamar a los futbolistas por su nombre de pila “como a mis alumnos”. Lo que está claro es que se trata de un profesional que no ha pasado indiferente en ninguno de los sentidos e, incluso, a nivel internacional le consideran el mejor árbitro español. Eso sí, es de tarjetero fácil, lo que le ha servido para batir varios récord, uno de ellos en el último Mundial, el de Qatar 2022, una de sus últimas grandes citas.

En esta competición arbitró el encuentro de cuartos de final entre Países Bajos y Argentina. Un partido donde el árbitro fue uno de los grandes protagonistas, dado que mostró un total de 17 tarjetas amarillas y una roja. Una actuación que le sirvió para batir todo un récord histórico en una Copa del Mundo y convertirse en el árbitro que más cartulinas ha mostrado en un torneo de estas cualidades. Cabe destacar que el colegiado ya venía calentando motores, dado que en los otros dos partidos que había dirigido del Mundial previamente, había mostrado 10 tarjetas amarillas.

Lo cierto es que su récord no quedó ahí, dado que en el partido siguiente al de la albiceleste, el derbi catalán (Barcelona-Español) mostró un total de 17 tarjetas amarillas y dos rojas. Es decir, en tan solo dos partidos, Mateu Lahoz sacó 34 tarjetas amarillas y 3 rojas. Todo un récord histórico.