Irene de Grecia, así es la sorprendente vida de la desconocida hermana de la reina Sofía

La familia real se ha convertido en una de las protagonistas de los quioscos de esta semana. No solo por la jura de bandera de la princesa Leonor, celebrada el pasado sábado 7, sino que además han desvelado el complicado momento que estaría pasando la reina Sofía. Ha sido la revista Lecturas la que ha contado en exclusiva que la princesa Irene de Grecia está aquejada del llamado ‘mal del olvido’.

Según la publicación, esto ha causado que a la griega se le comiencen a olvidar algunos de sus recuerdos de su infancia y juventud, además de que “los rostros de sus seres más queridos también se vuelven confusos y poco claros”. Sin duda, una noticia muy triste para todos ellos, aunque especialmente para su hermana, ya que ambas han pasado la vida juntas y se han convertido en un apoyo indispensable la una de la otra.

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Desde que la emérita se casó con el rey Juan Carlos, en el año 1962, Irene se convirtió en otro miembro más de la familia real, aunque en un segundo plano. Discreta donde las haya, la hija pequeña de Pablo I de Grecia siempre ha querido mantenerse a la sombra de su hermana, apoyándola en todas sus decisiones y siempre unos pasos por detrás de ella. Pero eso no significa que no haya hecho nada significativo, ni mucho menos.

La princesa Irene ha tenido una vida fascinante que comenzó en su nacimiento, pues al contrario que sus hermanos ella nació en Ciudad del Cabo, Sudáfrica, donde sus padres estaban exiliados tras la invasión de Italia y posterior ocupación nazi de Grecia. Cuando tenía 4 años, Irene y su familia regresaron al país heleno, donde comenzó realmente su vida de princesa.

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Todo cambió con el golpe militar, pues se exilió junto a su madre a la India, donde vivió hasta poco antes del fallecimiento de esta, en 1981. Fue entonces cuando decidió trasladarse al Palacio de la Zarzuela para vivir con su hermana y su cuñado, los por entonces reyes de España. Pese a su traslado, Irene ha estado viajando de forma constante al país asiático, al que se siente muy unida.

Aunque estudió en algunos de los mejores colegios de la época, Irene siempre destacó por su talento para la música y fue alumna de la pianista Gina Bachauer, llegando a ser concertista profesional. Debutó en el año 1969 en el Royal Festival Hall, de Londres, tocando el Concierto nº 2 de Bach y lo hizo tan bien que la aplaudieron durante tres minutos.

De su etapa en la India habría sacado buena parte de su filosofía de vida y, aunque nunca ha sido confirmado de manera oficial, Irene se habría convertido a una de las religiones del país, bien el hinduismo o el budismo. Además, al igual que la reina Sofía, no come ningún tipo de carne y tiene una amplia conciencia ecológica.

En cuanto a su lado más personal, Irene de Grecia nunca se ha casado, aunque se dijo que mantuvo una relación durante años con un hombre casado. Sin embargo, su destino podría haber sido otro ya que Olav V de Noruega esperaba que su hijo y heredero al trono, Harald, se casara con ella.

En el año 2022 vivió uno de sus momentos más complicados cuando le diagnosticaron un cáncer de mama del que se recuperó, aunque para ello se estuvo tratando durante seis meses. Sobre esta etapa habló con la biógrafa Eva Celada, a quien contó que su hermana preparó una zona de Zarzuela para ella, para que se recuperara en casa. “Ella se sentaba en un sillón en la habitación para hacerme compañía y a la vez estudiaba sus papeles y ponía al día la agenda. Cuidó de mí en cada momento durante aquellos meses”, relató.