El Ayuntamiento de Bilbao se ha visto obligado a cerrar tres zonas del parque Doña Casilda, el pulmón verde de la ciudad, por la aparición de la abeja minera o Andrena. El Consistorio ha insistido en que no es una especie agresiva pero que pueden atacar si se sienten en peligro, por lo que es mejor no acercarse a ellas.
Por el momento, se han precintado varias zonas del parque y se han colocado carteles para advertir a los vecinos, aunque la directora de Salud y Consumo del municipio, Ana Collia, ha insistido en que “las abejas no son peligrosas si no se les ataca”.
Te puede interesar: Prohibido dejar a tu perro solo en la puerta del ‘súper’: líneas maestras y letra pequeña de la Ley de Bienestar Animal, que excluye a la cabra de la Legión
¿Cómo es la abeja minera?
Esta especie de abeja no vive en colmenas, sino bajo tierra, donde construyen sus propios túneles para criar de sus huevos, de ahí el nombre por el que son comúnmente conocidas. El calor puede ser el factor que ha motivado su desplazamiento desde el sur hasta este municipio del norte de España, ya que esta especie no suele habitar en esta zona.
Te puede interesar: La crueldad se financia con tu dinero: el oscurantismo tras el maltrato animal y las ‘trampas’ para ocultar el gasto en las fiestas de pueblo de España
Chinches en Bilbao
Los vecinos de municipio también han advertido de la presencia de chinches en la ciudad. Sin embargo, no se trata de un hecho aislado. Además, durante las últimas semanas, varios vecinos de Barakaldo, y concretamente del barrio de Cruces, han reportado la presencia de plagas de chinches en sus hogares. Así mismo, El correo de Bizkaia informaba de que son muchos los que están intentando zafarse de ellos a través de diversas estrategias.
Plaga de chinches en varias ciudades del mundo
Muchas ciudades en el mundo también han visto como ha aumentado la presencia de estos molestos insectos. El periódico Daily Mail informaba hace unos días de la aparición de una plaga de chinches en el transporte público de París. De este modo, estos insectos han empezado a reproducirse entre las tapicerías de los asientos de autobuses, trenes y vagones de metro. Y lo que es más, se estima que una décima parte de los hogares franceses han tenido algún problema de chinches durante los últimos años.
En México, alumnos de varias facultades de la UNAM, como la de Derecho o Veterinaria, han denunciado la presencia de chinches en las aulas. El malestar de los alumnos creció al escuchar de boca de autoridades que la culpa era de los mismos estudiantes.