La reveladora reflexión de Lobato sobre Sainz y Alonso: “Carlos tiene dos problemas y Fernando una cualidad que él no”

Hace tiempo que la temporada de Aston Martin se ha convertido en una montaña rusa de emociones. Arrancaron la temporada con seis podios en ocho carreras, todos ellos con la firma de un Fernando Alonso, cuyos resultados cayeron una vez alcanzado el ecuador del año y una espiral de incertidumbre pasó a recorrer el box la escudería británica. Las carreras se sucedieron sin volver a ver al asturiano tocando metal y empapado en champán, hasta que volvieron de vacaciones. Aston Martin aprovechó el mes de parón para mejorar sus problemas de rendimiento y en Países Bajos volvieron al podio.

Recorrido inverso ha realizado Carlos Sainz. Arrancó el curso dubitativo y lo está acabando en su mejor nivel competitivo y abonado al podio. Ha sido el único piloto que no es de Red Bull capaz de ganar una carrera, casi nada. “No voy a mentir, me siento muy bien con el coche y estoy pilotando muy bien, probablemente en mi mejor nivel desde que soy piloto de Ferrari… ¡por fin estoy sacando todo mi potencial! Y estoy feliz de ver eso. Estoy contento también con el trabajo que estoy haciendo con mis ingenieros para poco a poco seguir extrayendo más y más potencial y más prestaciones del coche. Obviamente me dará mucha confianza para seguir adelante. Necesitamos seguir trabajando en el ritmo de carrera. En Monza se pudo ver lo que pasó y Singapur fue otra buena prueba para ver el progreso que hemos logrado en esa área”, afirma el propio Carlos.

La comparación entre los dos pilotos españoles se acentúa teniendo en cuenta la clasificación del campeonato. Tan solo 24 puntos separa a un Alonso, cuarto, de Sainz, quinto. “Lo que pasa es que Carlos tiene dos problemas: uno, que su apellido es Sainz y tiene siempre la sombra de su padre, aunque ahora están caminando en paralelo, pese a que no tenga aún sus títulos y luego el precedente de Fernando Alonso. Y no es que sea un problema, que es campeón del mundo y tiene 32 victorias”.

“El problema de Carlos es que Fernando es una máquina de llamar la atención, de generar pasión, es un catalizador de pasiones, mientras que Carlos no despierta las mismas pasiones. Y a mí me llama mucho la atención porque cuando vas por la calle, muchos chavales jóvenes me paran y me preguntan por Fernando, el 95% de ellos. Y yo les digo, sí, Fernando está bien, pero Carlos también, que es más de vuestra generación”, asegura el periodista.

“Creo que Fernando es un tío diferente al resto. Transmite una energía que no es normal. Cada vez que habla sube el pan.l Dice lo que piensa, sin filtro. Sainz es más domesticado y tranquilo. Piensa lo que tiene que decir, no se mete en polémicas… Fernando es más claro y eso vende. Ahora, si eres jefe de equipo, casi prefieres a un Carlos que no te va a poner la vida difícil, más que a un Fernando que es mucho más agresivo”.