La Comunidad de Madrid prepara una ley para dar “más protagonismo a la familia” y reconocer a los abuelos como “sujetos de derecho”

La Comunidad de Madrid prepara una nueva Ley de Familias con el objetivo de “recuperar el protagonismo de los padres en el ámbito familiar y potenciar la figura de los abuelos”, según ha explicado la consejera de Familia, Juventud y Asuntos Sociales, Ana Dávila, en un encuentro informativo con la prensa. La norma impulsada por el Gobierno regional que lidera Isabel Díaz Ayuso “garantizará el respeto a la libertad y autonomía familiar en la educación de los hijos frente a los poderes públicos” y reconocerá a los abuelos como “sujetos de derecho”.

La consejera considera necesaria esta norma porque, a su juicio, la familia ya no es lo que era, “se ha difuminado en el contexto social” en muchos países, pues han cambiado las dinámicas, “sobre todo por la movilidad”, cuando los jóvenes se van a estudiar o trabajar fuera. “En Estados Unidos, por ejemplo, no comparten encuentros familiares como en España y no queremos que aquí suceda algo así”, ha señalado Dávila

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La futura ley otorgará un “mayor protagonismo a la familia”, pues en ocasiones a los padres “se les impide opinar en determinados aspectos relacionados con la educación”, ejemplifica Dávila, que asegura que no se trata de dar una herramienta para que los progenitores puedan vetar contenidos en las aulas –el llamado pin parental–, sino de “fomentar la libertad de elegir cómo las familias quieren enfrentar sus problemas”. “En la Comunidad de Madrid abogamos por la libertad de elección, se trata de recuperar el protagonismo de la familia en las decisiones que la competen”, añade sin precisar muchos más detalles.

Respecto a la figura de los abuelos, que serán reconocidos en la norma como “sujetos de derechos en atención a su función como pilar fundamental del núcleo familiar”, también serán considerados “colaboradores de los padres en la educación de los hijos en la transmisión de valores, conocimientos, tradiciones y experiencias”. De esa manera, la región asegura que facilitará el ejercicio del derecho de los abuelos a “tratar y visitar a sus nietos, a ser partícipes de su vida”, y en el caso de que ambos progenitores no puedan ejercer la patria potestad, se valorará “preferentemente” que los menores permanezcan con los abuelos, siempre y cuando la medida favorezca a los niños y niñas.

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A partir del 1 de enero de 2024, la Comunidad de Madrid activará una nueva ayuda de 1.800 euros por hijo nacido, tanto para partos como adopciones múltiples. Cada familia recibirá en un solo pago 3.600 euros en caso de parto o adopción de dos hijos, 5.400 en el caso de tres, y así sucesivamente, señala la consejería.

Esta aportación se suma, y es acumulable en caso de cumplir los requisitos, a las ayudas de 500 euros por hijo que reciben las gestantes menores de 30 años desde la semana 21 de embarazo, así como adoptantes, y hasta que el hijo cumple 2 años. Según datos de la consejería, desde la entrada en vigor de estas ayudas en 2022, se han gestionado 17.259 solicitudes, y su financiación se acaba de ampliar con 5,4 millones.

Por otro lado, la región ayuda con “hasta 5.000 euros anuales por niño a familias acogedoras (temporales o permanentes) que tengan que afrontar gastos extraordinarios”.

La ley, cuya consulta pública comenzará antes de finales de año, contempla un nuevo modelo de atención a los mayores “basado en la libertad de elección para que ellos puedan elegir si quieren vivir en su hogar, con todos los apoyos necesarios, o vivir en un centro residencial donde se van a impulsar más medidas de calidad y con personal más profesionalizado”, ha dicho ante la prensa la consejera. Al ser consultada sobre la medicalización de las residencias, después de que la Comunidad de Madrid asegurase que tras la pandemia se iban a medicalizar todos los centros con personal y medios suficientes, Dávila se ha limitado a señalar que se trata de “un tema sanitario” y, por tanto, “esa atención corresponde al servicio madrileño de Salud”.

Cabe recordar que durante la pandemia más de 7.200 ancianos murieron en las residencias de la Comunidad de Madrid y sus familias aún siguen reclamando “justicia y reparación” por la gestión del Ejecutivo autonómico. De hecho, los familiares de los mayores, agrupados en la Marea de Residencias, a día de hoy denuncian “la precariedad laboral y falta de servicios” en esos centros.

La Comunidad de Madrid asegura que “ya se están introduciendo mejoras en la teleasistencia y en ayuda a domicilio, además de más plazas residenciales y un aumento en la inversión de los contratos para residencias de gestión indirecta”. A comienzos del año que viene habrá un nuevo servicio de teleasistencia avanzada tras la aprobación de una inversión de 33,6 millones de euros, indica la consejería de Familia, Juventud y Asuntos Sociales.

Con la intención de paliar la soledad en los mayores, la región creará el primer Cuerpo de Voluntariado Joven, un plan vinculado al Carné Joven que formarán personas de entre 14 y 30 años para acompañarles a través de llamadas y visitas a sus domicilios o a las residencias en las que viven.

La región ampliará, además, el Servicio de Atención de Adicciones Tecnológicas con un equipo itinerante “formado por un psicólogo, un trabajador social y un orientador jurídico” que se desplace por los municipios de la región “con carácter formativo y preventivo” tanto para padres y adolescentes como para educadores, concluye Dávila.