Susanna Griso está teniendo una dulce vuelta al cole tras su retiro estival. Tras la marcha de Ana Rosa Quintana a las tardes, la presentadora de Espejo Público ha afianzado su liderazgo en la que es la temporada 18 del espacio matinal de Antena 3.
A este buen momento profesional, la periodista ha sumado una nueva alegría al ser una de las galardonadas en la IX edición de los Premios Museo Chicote, un reconocimiento a su trayectoria como comunicadora que recibe con mucha emoción, pues además tiene un significado muy especial para ella: “Este fue el primer local en el que estuve cuando vine a Madrid, aquí me tomé mi primer cóctel”, contaba minutos antes de la gala, que tuvo lugar este miércoles 27 de septiembre en la histórica coctelería madrileña que da nombre a los premios.
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“Es casi como el colofón a 25 años en Madrid”, añade Griso. Además, afirma que al alcanzar la ‘mayoría de edad’ del programa, tanto ella como el equipo se han vuelto “más osados e irreverentes”. “Nos hemos soltado un poco la coleta”, comenta.
Tras ese cambio al ‘gamberrismo’ se encuentra un hombre que lideró uno de los programas históricos de la cadena rival, Sálvame. Y es que Alberto Díaz está al frente de la crónica social de Espejo Público, que ha fichado a numerosos rostros del ya extinto espacio de Telecinco. Sobre la incorporación del director, Susanna apunta que “está siendo buenísimo para el programa, (...) aporta savia nueva y nos ha venido muy bien a todos. Estamos muy contentos y además estoy convencidísima de que el programa va a crecer todavía más”.
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Este giro hacia el corazón más irreverente ha sido visto como una “salvamización”, un término ante el cual la presentadora se limita a defender que Alberto Díaz es “un maestro en el entretenimiento”. “Somos personas que venimos de informativos, de actualidad, tenemos ese ADN y entonces él nos aporta. Nos faltaba su figura en el apartado de entretenimiento”, agrega.
La marcha de Ana Rosa
Con el salto de Ana Rosa Quintana a las tardes de Telecinco, se puso fin a una histórica competición en las mañanas, un cambio que la presentadora de Espejo Público confiesa haberse tomado con calma. “Ahora la presión es para Sonsoles (risas). La verdad es que estoy un pelín más descansada”, reconoce.
A pesar de que ahora ha ampliado su ventaja en cuanto a audiencias se refiere, la periodista se niega a afirmar que es la nueva reina de las mañanas. “Nunca me he querido otorgar ningún cetro y ahora menos. Soy sumamente prudente. Es verdad que los datos están siendo muy buenos y somos líderes, pero de ahí a ser reina va un trecho. Yo siempre opto por ser muy modesta y tomarme las cositas con mucha tranquilidad”, sentencia.