El juez del caso Rubiales imputa al exseleccionador Jorge Vilda y a dos altos cargos de la Federación por las coacciones a Hermoso

El juez instructor de la Audiencia Nacional Francisco De Jorge, que investiga el beso del expresidente de la RFEF Luis Rubiales a la futbolista Jenni Hermoso, ha citado a declarar en calidad de investigados al exseleccionador femenino de fútbol, Jorge Vilda, y a los directores de la Selección masculina y de Marketing de la Real Federación Española de Fútbol, Albert Luque y Rubén Rivera, según ha informado la Audiencia Nacional. Los tres altos cargos de la Federación declararán ante el juez el próximo 10 de octubre.

Estaba previsto que Luque y Rivera comparecieran este jueves en la Audiencia Nacional para ser interrogados en calidad de testigos, pero el magistrado ha cambiado su condición en el procedimiento, donde ahora figuran como investigados. El juez les atribuye, al igual que a Vilda, un delito de coacciones por las supuestas presiones a las que sometieron a Jenni Hermoso tras el beso con Rubiales en la entrega de medallas del Mundial de fútbol femenino de Australia.

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De Jorge mantiene las citaciones previstas para este jueves de la jefa de prensa de la selección femenina, Patricia Pérez, y del exdirector de Integridad de la RFEF, Miguel Caba, que declararán en calidad de testigos. El próximo lunes lo harán tres compañeras de Hermoso en la Selección, en concreto Alexia Putellas, Irene Paredes y Misa Rodríguez.

Jorge Vilda fue destituido de su cargo como seleccionador el pasado 5 de septiembre. El terremoto en la Federación también provocó el despido de Andreu Camps, secretario general y mano derecha de Luis Rubiales, así como del director de Integridad, Miguel García Caba.

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Dos de los ahora investigados, Albert Luque y Rubén Rivera, fueron señalados por las jugadoras de la Selección por haber acudido al viaje de celebración del Mundial en Ibiza como supuesta medida de presión a Jenni Hermoso en plena polémica por el citado beso.

Los nombres de los dos testigos de la RFEF, Patricia Pérez y Miguel García Caba, están vinculados con el caso, ya que la jefa de prensa de la Selección femenina habría declarado ante el departamento de Integridad sobre los hechos sintiéndose presionada por el círculo de Rubiales. Además, habría sido la persona que enseñó a Jenni Hermoso el comunicado que la RFEF emitió en palabras de la futbolista tras lo ocurrido.

Esta batería de citaciones llegan tras la primera declaración de Rubiales ante el juez De Jorge, quien le impuso una orden de alejamiento de 200 metros respecto a la víctima, con la que también tiene prohibido comunicarse por cualquier medio durante la instrucción de la causa. La teniente fiscal de la Audiencia Nacional, Marta Durántez Gil, solicitó como medidas cautelares para Rubiales una orden de alejamiento de 500 metros, la prohibición de las comunicaciones con la futbolista y la obligación de firmar en el juzgado cada 15 días.