Martin Scorsese admite que no debió hacer ‘Shutter Island’ y que quizá solo le quede una película por rodar

El director Matin Scorsese sigue dejando grandes tiulares, y no necesariamente todos son criticando a Marvel y las películas de superhéroes. Tras cuestionar el concepto de la listas y los ‘TOP10′, el cineasta ahora ha dirigido sus críticas hacia sí mismo, mirándose en el espejo y reflexionando sobre su propio pasado, aunque eso signifique admitir que hay algunas películas de las que no se siente tan orgulloso como de otras. Y no estamos hablando de un director cualquiera precisamente, sino del de clásicos del cine como Taxi driver, Uno de los nuestros o Toro salvaje.

En una reciente entrevista concedida a la revista GQ, el director neoyorkino se ha abierto a repasar de manera amplia su carrera y echar la vista atrás a aquellas malas decisiones o simplemente aquellas de las que más se arrepiente. Por ejemplo, es de sobra conocido el episodio que aconteció en 2002 con Gangs of New York, una película a la que dedicó mucho tiempo y que para el cineasta fue arruinada en gran medida por la intervención del estudio -en este caso, del archiconocido productor Harvey Weinstein- en ella, algo que provocó que Marty se considerase abandonar la industria: “Me di cuenta de que no podía trabajar si tenía que hacer más películas de aquella manera. Si era esa la única forma, tendría que parar, porque los resultados no eran satisfactorios”, confesaba Scorsese.

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Aquella mala experiencia nos lleva al caso que nos ocupa, el de que más tarde se arrepintiese de hacer Shutter Island, una de sus películas más conocidas de los últimos años y que sin duda es querida por los fans, pero que para Scorsese no resulta del todo esencial en su carrera. De hecho, el cineasta la considera su “última película de estudio” y cree que debería haber ido a hacer directamente Silencio en vez de realizar el thriller con Leonardo DiCaprio y Mark Ruffalo: “(Ganar el Oscar) me animó a hacer otra película con Shutter Island. Resultó que tendría que haber hecho probablemente Silencio”, admite Scorsese.

El director acabó haciendo Silencio seis años después, pero para entonces Shutter Island ya se había convertido en todo un fenómeno, a pesar de que no fuera un proyecto que apasionase a Scorsese de la misma manera que lo hizo la película sobre jesuitas con Andrew Garfield y Liam Neeson. Es por ello que los últimos años de carrera que le puedan quedar quiere dedicarlos a películas con las que realmente se sienta volcado, aunque solo sean una o dos las que le queden por delante.

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Cerca de cumplir 81 años pero aun con el espíritu de aquel joven que empezó a hacer películas allá por los años 60 en Nueva York, Martin Scorsese es consciente de que no le queda tanto tiempo por delante, pero ello no va a arruinar esta vez que se despida como director con alguna película más. “Si pudiera reunir la energía, si Dios quiere, para hacer un par más, o una quizá, y ya estaría. ¿Vale? Hasta ahí llegaré. Intentas seguir hasta que no puedes”.

Scorsese puede que tenga varios proyectos entre manos, pero de momento su película más inmediata pasa por ser Los asesinos de la luna, en la que volverá a trabajar con dos de sus actores fetiche, Robert De Niro y Leonardo DiCaprio, y en la que contará la historia de la tribu Osage, un poblado de nativos americanos que comenzó a ser atacado tras enriquecerse con el petróleo, hasta el punto de que un recién fundado FBI tuvo que abrir una investigación al respecto.