La Comisión Europea propone autorizar el glifosato hasta 2033, el herbicida más utilizado tanto a nivel mundial como en la Unión Europea (UE). Esta propuesta rebaja en cinco años el tiempo propuesto por el lobby empresarial que distribuye el producto, que busca su renovación, aunque deberá ser aún refrendado por los Estados miembro.
Tras el análisis de la conclusión y del informe de evaluación de la renovación elaborado por los países de la UE en calidad de ponentes conjuntos, los servicios de la Comisión han considerado que la aprobación del glifosato puede renovarse, sujeto a determinadas condiciones, y han presentado un proyecto de informe de renovación, pendiente de recibir comentarios de las capitales.
Te puede interesar: 45.000 enfermeras solicitan la jubilación anticipada al Gobierno: “Pierden cinco años de vida por cada 15 de trabajo en turnos de noche”
Este viernes se celebraba una nueva reunión entre el Ejecutivo comunitario y los Veintisiete para discutir el proyecto de Informe de Renovación y el proyecto de Reglamento de cara a finalizar la toma de decisiones antes del 15 de diciembre, cuando expira la aprobación actual. La propuesta se votará el próximo 12 de octubre.
La propuesta ha resultado sorprendente para los grupos ecologistas, muy críticos con el proyecto: “Permitir 10 años más de este herbicida se opone frontalmente a la opinión de los habitantes europeos, sondeada recientemente a través de una encuesta (sólo el 14% está a favor de que se vuelva a autorizar). También contrasta con lo que pidieron hace cinco años, cuando un millón de personas pidieron formalmente su prohibición”, apuntan desde la asociación Libres de contaminantes hormonales.
Te puede interesar: Évole destapa el cinismo de Josu Ternera y de ETA en su documental que presenta en el Festival de San Sebastián: “Matar no es un placer para nadie”
Efectos del glifosato
El glifosato es un herbicida que aniquila todo tipo de plantas y se usa de forma no selectiva para matar hierbas y arbustos. El más vendido es el RoundUp, comercializado por Monsanto, cuya venta le supone miles de millones de euros cada año. Un estudio de Ecologistas en Acción revelaba que las analíticas realizadas por los organismos de cuenca durante los años 2015-2019 detectaron una la elevada presencia de glifosato en los ríos y aguas subterráneas de España, ya que este producto es “el medio acuático del herbicida más vendido en España”. Según ese estudio, en un 11% de las analíticas de aguas subterráneas se detectó glifosato.
“Gilles-Enric Seralini (especialista en biología molecular de la Universidad de Caen, Francia), ha demostrado que el glifosato estimula la muerte de las células de embriones humanos. También descubrió que algunas células de la placenta humana son muy sensibles al glifosato, incluso en dosis muy inferiores a las utilizadas en agricultura. Se ha llegado a determinar que una exposición 500 veces menor a la que tiene lugar en los campos tratados con este herbicida induce a la muerte celular”, aseguraba en un reportaje Nacho Escartín, del área de Agroecología, Soberanía Alimentaria y Mundo Rural de Ecologistas en Acción.