Los mejores momentos de Miguel Bosé en ‘El Hormiguero’

Este martes, el invitado que ha visitado el plató de El Hormiguero ha sido Miguel Bosé, donde ha presentado su nuevo documental sobre su vida que ya está disponible para ver en Movistar Plus+. Durante la parte de la entrevista, el cantante ha hablado del reciente robo en su casa, sobre el poder que tenía su padre en la época de Franco, aunque también ha hablado de su madre y sobre la separación de ambos; de cuando se convirtió de la noche a la mañana en una superestrella; del alcohol y de sus hijos.

Nada más comenzar la entrevista, Bosé ha hablado del robo en su casa en México: “Fue hace un mes, estábamos ya dormidos en casa, los chicos estaban durmiendo con un amigo. De repente me despierta algo, miro y estoy encañonado con una pistola, con silenciador. No eran profesionales porque al final nos ataron con los lazos de mis zapatillas. No hubo violencia, había empujones entre ellos, insultos hacia mí, pero no violencia física”. A lo que ha añadido: “Por el interfono quien dirigía todo era una mujer. Ha sido una experiencia para olvidar lo antes posible”.

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Pablo Motos también le ha preguntado por su familia, en concreto por su padre y por cuánto por poder tenía durante la época de Franco. El artista ha explicado que Franco llamaba a su padre mi niño. “En las fotos donde están juntos tus les ves y franco le mira que se le cae la baba. Era ÉL español, una imagen de España que era todo lo que el régimen quería: muy macho, muy conquistador, torero, elegante, simpático, con don de gentes, arrasaba y gran cazador”. Tal era la relación entre ambos que Franco le concedía todo “hasta que su hermano Domingo, que era uno de los fundadores del Partido Comunista en el exilio, se moviese libremente por España. Todo lo que le pidiese se lo concedía”.

Sobre su madre asegura que era la mujer que su padre se merecía: “Claro, porque era una puñetera. Tal para cual, dos egos inmensos, dos personalidades con trastorno narcisista”. Respecto a su parecido con su padre, considera que físicamente es como su madre, “pero en el carácter soy igual que él, totalmente Dominguín”. También ha recordado la separación de sus padres: “Cuando mis padres se separan, la putada que le hace mi padre a mi madre es dejarle la casa de Somosaguas donde habíamos vivido siempre. Mi madre no tenía recursos y él pasaba para sus hijos muy poco, treinta mil pesetas. Cortamos el agua caliente, la calefacción, calentábamos ollas en una bañera y nos bañábamos los tres por turnos… Fueron años muy feos”.

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El Florida Park supuso un antes y un después en su carrera. De la noche a la mañana se convirtió en toda una estrella y pasó de ser Miguelito a ser Miguel Bosé. “Hice todo diferente, lo que nadie hacía en España, entre lo que estaba el baile”. Tal fue el grado de fama que alcanzó que su casa de Somosaguas se convirtió en una especie de refugio de artistas, donde incluso vivió Alejandro Sanz: “Le dije que se quedara un fin de semana y se convirtió en un año y medio, ahí compuso El alma al aire”.

Respecto al mundo de las drogas, ha explicado que sentía “debilidad” por ellas, la cual pasó después a afición y luego “a cosas mayores”. “Estuve 30 años haciendo de todo, hasta que el consumo pasó a alejarse de la fiesta y a ser habitual, ahí lo dejé, en esa época estaban mis hijos por llegar”, ha asegurado. El presentador también ha afirmado que la droga que más le esclavizaba era el alcohol. “Es lo que más cuesta dejar, es el veneno más legal que hay”, “yo lo dejé todo el mismo día y no he vuelto a tomar nada desde hace 13 años”.