La selección española femenina de fútbol sigue envuelta en un terremoto constante. Este martes, lo que ha echado más leña al fuego del surrealismo, que lleva casi un mes creciendo por momentos, ha sido el lugar adonde tienen que acudir las convocadas por la nueva seleccionadora, Montse Tomé. El dilema al respecto del punto de partida de la concentración ha estado entre Madrid y Valencia, sin que la Federación haya esclarecido su plan de viaje hasta el mediodía, cuando el revuelo ya estaba servido.
“La Selección Española Femenina se concentrará este martes, 19 de septiembre de 2023, en el Hotel Tryp Alameda de Madrid para preparar los dos primeros duelos de la UEFA Women’s Nations League ante Suecia y Suiza. La expedición se desplazará esta tarde, a las 14:10 horas, a Oliva (Valencia) para iniciar la concentración y empezar los entrenamientos de cara al primer choque de esta temporada. El combinado español viajará a Suecia el jueves, con salida a las 10:00 horas desde Madrid, y se enfrentará a la escuadra local el viernes, a las 18:30 horas, en el Estadio Gamla Ullevi de Gotemburgo. El regreso a España está previsto el mismo viernes, 22 de septiembre, con llegada al Aeropuerto de Sevilla sobre las 22:30 horas. El domingo, 24 de septiembre, se desplazarán a Córdoba para continuar preparando el segundo encuentro de la Nations League, que será ante Suiza en el Estadio Nuevo El Arcángel el martes, 26 de septiembre, a las 21:00 horas. La primera concentración del curso llegará a su fin el miércoles, 27 de septiembre de 2023″, ha expuesto la RFEF para salir al paso del lío.
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Cuando se ha hecho oficial este comunicado, las jugadoras seleccionadas que militan en el Real Madrid y el Atlético de Madrid ya habían acudido al hotel de la capital donde se las esperaba. Se trata de las madridistas Misa Rodríguez, Olga Carmona, Athenea del Castillo, Tere Abelleira y Oihane Hernández y de la rojiblanca Eva Navarro. Todas ellas se encontraban en la ciudad y ha sido la primera de ellas quien más dura ha sido a su llegada al alojamiento situado en Barajas, aun manifestándose muy brevemente.
Misa Rodríguez deja claro lo que piensan las internacionales
“¿Habéis hablado con Montse?”, le preguntaban a la portera canaria mientras se dirigía a la puerta del Tryp Alameda. “No, no”, respondía Misa. A continuación, le interpelaban: “¿Estás contenta de estar en la lista de Montse Tomé?”. Entonces, Misa, contundente y justo antes de marcharse, se giró hacia los periodistas y zanjó la cuestión sin rodeos: “No”.
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“He hablado con ellas, pero eso se queda entre nosotras”, declaró Montse Tomé este lunes. Más adelante, reconoció que le gustaría “no comentar mucho” sobre las supuestas conversaciones mantenidas con las futbolistas. Para después asegurar: “Ninguna jugadora me ha pedido no venir convocada”. Todas estas declaraciones están quedando en entredicho en las últimas horas.
En un nuevo comunicado en nombre del plantel, se reafirma “la firme voluntad de no ser convocadas por motivos justificados”, porque “estas afirmaciones siguen plenamente vigentes”; se pide una “información rigurosa” a la RFEF, dado que “no se ha transmitido nada diferente a ello” a ningún integrante de la misma; se habla de “posibles consecuencias legales” al hacer una lista “de la que habíamos pedido no ser convocadas” y, por último, se señala que “la convocatoria no se ha realizado en tiempo y forma” según el reglamento de la FIFA, entendiéndose, por tanto, que “la RFEF no se encuentra en disposición de exigirnos acudir a la misma”.
Aunque las renuncias aún no son descartables, podrían aparcarse, aun a regañadientes, en la mayoría de los casos. Entre las “infracciones muy graves” de la Ley del Deporte española, se incluye “la falta de asistencia no justificada a las convocatorias de las selecciones deportivas nacionales, así como la no puesta a disposición de las selecciones nacionales de las personas deportistas que hayan sido designadas para formar parte de las mismas”. Las penalizaciones van desde “multa no inferior a 3.000,01 ni superior a 30.000 euros” hasta la “suspensión de licencia federativa o habilitación equivalente de carácter temporal por un periodo comprendido entre los dos y los quince años”. Pasando por la “prohibición de acceso a los estadios o lugares de desarrollo de las pruebas o competiciones por tiempo no superior a cinco años”.
Es el artículo 3.2 del Anexo I del Reglamento sobre el Estatuto y Transferencia de Jugadores de la FIFA al que se agarran las jugadoras: “La asociación que desee convocar a un jugador/a deberá hacerlo por escrito al menos 15 días antes del primer día del periodo internacional (v. art. 1, apdo. 4 del anexo 1) en el que se lleven a cabo las actividades del equipo representativo para el que se le necesita. Las asociaciones que deseen convocar a un jugador/a para la competición final de un torneo internacional deberán notificarlo por escrito al jugador al menos 15 días antes del comienzo del periodo de liberación correspondiente. Al mismo tiempo, se deberá comunicar por escrito la convocatoria al club del jugador. Asimismo, se aconseja a las asociaciones incluir a la asociación del club en cuestión en la convocatoria. El club deberá confirmar la liberación del jugador/a dentro de los seis días siguientes”.
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Mientras se esclarece quién acude y quién no, la lista de 23 es la siguiente: Misa Rodríguez, Cata Coll y Enith Salón (porteras); Irene Paredes, Laia Aleixandri, María Méndez, Oihane Hernández, Olga Carmona, Ona Batlle y Mapi León (defensas); Aitana Bonmatí, Alexia Putellas, Patri Guijarro, María Pérez, Tere Abelleira y Rosa Márquez (centrocampistas) y Athenea del Castillo, Esther González, Eva Navarro, Mariona Caldentey, Inma Gabarro, Amaiur Sarriegui y Lucía García (delanteras).