El jefe de Alonso responde a sus quejas por radio en Singapur: “Si el rendimiento no es el que espera...”

Fernando Alonso vivió su peor fin de semana de la temporada precisamente en la cita donde muchos confiaban en que llegaría el mejor: el Gran Premio de Singapur. El bicampeón del mundo español no pudo compartir la alegría de su compatriota Carlos Sainz, que logró la segunda victoria de su trayectoria en la Fórmula 1. Todo lo contrario: en su domingo más nefasto en mucho tiempo, el piloto más veterano de la parrilla (42 años) concluyó último en el circuito urbano de Marina Bay. Lastrado por el ritmo, las paradas en boxes eternas y, sobre todo, una sanción de cinco segundos fatal, que le relegó sin remedio a la cola de la prueba.

La competitividad de Alonso es extrema y le lleva a querer estar siempre con los mejores. Cuando no lo consigue, evidencia a las claras su enfado. También fue el caso en esta ocasión, a raíz de que Aston Martin no estuvo a la altura de las expectativas. Debido a esa falta de empuje, el asturiano empleó la radio para afirmar, con rotundidad, que el suyo era un “coche inconducible”.

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El ahora cuarto clasificado del Mundial entre los pilotos desea que la escudería británica esté en la pelea por el campeonato en el futuro. Dados sus siete podios durante lo que va de temporada, ya no se conforma con las medianías y exige a los integrantes de su equipo que el monoplaza que conduce se encuentre entre los más pujantes del Gran Circo. Decepciones como la sufrida en una carrera en la que se llegó a apuntar que podía llegar su tan esperado triunfo número 33 no gustan en absoluto a Alonso, que apenas quiso hacer declaraciones tras lo ocurrido.

El batacazo fue generalizado para Aston Martin, puesto que el compañero del ovetense, Lance Stroll, ni siquiera pudo correr tras sufrir un accidente de cierta entidad en la clasificación del sábado. Sin puntos que sumar al casillero, Mercedes y Ferrari ya superan a los de Silverstone entre los constructores. Un bajón ante el que el jefe de la escuadra verde, Mike Krack, no ha podido defenderse.

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“Como equipo tenemos que reconocer si un piloto es crítico. Si el rendimiento no es el que él espera y al que está acostumbrado… Creo que está bien”, tuvo que conceder Krack. “Es normal que los deportistas reaccionen así. Nosotros queremos que lo den todo. No hay problema alguno”, añadió.

No habrá tiempo para caer en las lamentaciones. El Gran Premio de Japón ya está a la vuelta de la esquina y en él habrá que intentar mejorar las prestaciones lo máximo posible. Suzuka es el trazado favorito de Alonso, aunque todo apunta a que los próximos compromisos del año no van a ser especialmente halagüeños para el coche número 14. Así pues, Singapur deja un regusto a oportunidad perdida en lo que respecta a Aston Martin, como ya sucedió en el caso de Mónaco.